Madrid, 1º de octubre. Ekin, que nació hace 12 años y es señalado por Madrid como aparato político de la organización armada ETA, anunció hoy su autodisolución ante la serie de cambios en el entorno de la izquierda abertzale (nacionalista) vasca y en el propio grupo armado. Es un paso más hacia la paz, dijo el presidente del gobierno vasco, el socialista Patxi López.

El anuncio se produce tras una semana de que los más de mil presos de ETA encarcelados en Francia y España firmaron el acuerdo de Gernika, en que renuncian por primera vez a la lucha armada y reclaman a cambio procesos de amnistía y beneficios penitenciarios.

El diario vasco Gara informó que ETA anunció que adopta el compromiso de colaborar con la Comisión Internacional de Verificación, en lo que el grupo considera un paso importante en la resolución del conflicto vasco.

El comunicado completo se conocerá en la edición escrita de este domingo. La composición de la Comisión de Verificación fue anunciada el miércoles pasado.

ETA designó a Ekin hace 12 años las tareas de organización y dinamización del conjunto del Movimiento de Liberación Nacional Vasco, en el que estaban integrados los segmentos sobre los que ETA tenía influencia o control.

Su labor era política, además de señalar las directrices estratégicas en su lucha por la independencia vasca y, en muchas ocasiones, la redacción de los comunicados en los que justificaban sus atentados.

Ekin nació hace 12 años como parte de una renovación del entorno de ETA para superar los procesos de ilegalización y desarticulación llevados a cabo desde la Audiencia Nacional, por lo que se le considera la sucesora de la histórica coordinadora KAS.

Un grupo de líderes de Ekin informó al diario Gara su decisión de poner punto final a sus actividades, autodisolverse tras un “debate profundo que comenzó ya en primavera y que se deriva del cambio radical de estrategia adoptado por la izquierda abertzale”.

Ha sido una reflexión tranquila, teníamos tiempo. Nuestra organización nunca ha basado su trabajo en dar respuesta a cada nuevo hecho que sucede en el día a día, sino que siempre ha mirado a largo plazo, y tampoco ha tenido que atender en estos meses urgencias como las elecciones, por ejemplo, advirtieron los voceros de Ekin.

Añadieron que lo realmente importante es que la ciudadanía vasca se implique ahora a fondo en un proceso que depende más que nunca del impulso popular y que también va a exigir un grado muy alto de compromiso.

Ekin tomó la decisión de autodisolverse, “animando a sus militantes a seguir trabajando por la independencia y el socialismo en la nueva apuesta de la izquierda abertzale” del País Vasco.

El presidente del gobierno vasco, Patxi López, afirmó que el anuncio es un paso más en el camino hacia la resolución del conflicto, si bien recordó que el paso definitivo será el anuncio de la desaparición de ETA, por lo que instó a todos los agentes políticos vascos a seguir trabajando.

Todos los pasos hacia la paz son importantes, sobre todo si son para consolidar y no dar marcha atrás. Lo que tiene que haber es inteligencia para seguir avanzando, ser muy constante y hacer lo que hay que hacer para que no haya nunca vuelta atrás en la violencia, advirtió el lehendakari.

Desde el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, el ministro del Interior, Antonio Camacho, consideró que ETA ha entrado en un proceso de disolución imparable y ha empezado a asumir que nunca más podrá condicionar con su barbarie la vida del país

En enero pasado, tras la declaración del alto el fuego de ETA, las bases y los líderes de la ilegalizada coalición Batasuna, a la que Madrid acusa de ser brazo político de ETA, iniciaron una consulta y un debate que culminó con la aprobación de un nuevo ideario, en el que por primera vez deciden rechazar sin ambages la violencia en general y la de ETA en particular.

La autodisolución de Ekin se suma así al apoyo de los presos etarras al acuerdo de Gernika y al anuncio de la conformación definitiva de los cinco personajes que conformarán la Comisión Internacional de Verificación del alto el fuego de ETA, que aspira a ser la garante de que la organización se encuentra realmente en tregua, de cara a los eventuales negociadores del Estado español y francés.

La propia izquierda abertzale explicó en breve comunicado que la decisión es coherente con la nueva fase política que vive la región, por lo que agradeció a Ekin y a su militancia que sigan aportando en el proceso político y su aportación en el ámbito de la construcción nacional de Euskal Herria.

La coalición abertzale Bildu se impuso en los comicios municipales de mayo pasado en el País Vasco, al convertirse en la primera formación en número de concejales con más de mil 100, y la segunda fuerza en número de votos, con el respaldo de 22 por ciento del electorado. Obtuvo la alcaldía de San Sebastián y el control de la diputación de Guipúzcoa, entre otros.