Acusan a Ángel Postigo de homicidio; él fue asaltado y golpeado en un hotel de paso
Lo señalan por la muerte de la madre de una sexoservidora que participó en el robo
Domingo 2 de octubre de 2011, p. 30
Al menos 200 estudiantes de artes marciales efectuaron una exhibición en el Monumento a la Revolución para denunciar las irregularidades en el proceso penal que se lleva contra uno de sus instructores, sentenciado a 20 años de prisión por el homicidio de una mujer cuando él era víctima de un asalto en el interior de un hotel.
La tarde del 25 de mayo de 2008, Ángel Postigo Yanaculis, experto en las disciplinas kali eskrima y jeet kune do, circulaba en su camioneta por calzada de Tlalpan. Allí abordó a una sexoservidora con la que se dirigió al hotel Palacio, ubicado en la calle Bolívar, y el cual desde el año pasado se encuentra en proceso de extinción de dominio, pues se presume que era utilizado para trata de personas.
Según consta en su declaración ministerial, al llegar a la habitación, Ángel le dijo a la mujer que no quería tener relaciones sexuales, sino sólo platicar con ella y que le pagaría los 400 pesos que acordaron; sin embargo, ella le dijo que para no hacerla de tos
le tenía que dar mil 600.
Al negarse, Postigo Yanaculis fue agredido por seis hombres y aunque él entregó sus pertenencias, lo golpearon, por lo que se defendió y logró escabullirse y llegar hasta el estacionamiento.
Pero allí, otro sujeto le apuntó con un arma de fuego, los otros agresores llegaron y rodearon a Postigo Yanaculis, quien hizo un movimiento con la mano para desviar el arma, momento en el que el agresor disparó e hirió a la madre de la sexoservidora.
En la confusión el artemarcialista logró subir a su camioneta y huir del hotel. Minutos después decidió denunciar el robo, mientras que la mujer lesionada fue internada en el hospital Rubén Leñero, donde fue operada con éxito y días después, dada de alta.
Las dos mujeres acusaron a Postigo Yanaculis de ser quien disparó contra una de ellas.
La madre de la sexoservidora murió un mes después de que fue dada de alta. Según los doctores que la atendieron el deceso se produjo por la herida de bala. La acusación contra Postigo se convirtió en una denuncia por homicidio.
El abogado del sentenciado, Ernesto Acuña, afirmó que el proceso estuvo plagado de irregularidades, como contradicciones entre las dos mujeres sobre la forma en que ocurrieron los hechos y pese a que la prueba de Harrison determinó que Ángel no había disparado, la juez 47 penal lo condenó a 20 años de prisión en el Reclusorio Oriente.
El defensor cuestionó la imparcialidad de la juzgadora, quien en una ocasión le dijo al hoy sentenciado que su marido había sido asesinado por policías y que por la forma en que él logro escapar de los asaltantes, para ella, Postigo forma parte y tiene una relación muy cercana con alguna corporación policiaca.