El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, afirmó que la estabilidad en la paridad cambiaria se regularizará cuando los inversionistas extranjeros comiencen a valorar que México, como destino de sus inversiones, ofrece las ventajas de seguridad y estabilidad macroeconómica.

Al participar en la Cumbre de la Comunicación, que organiza la Asociación de la Radio del Valle de México, manifestó que sin reformas estructurales el crecimiento del país para recuperarse de la actual inestabilidad financiera podría durar entre cuatro y cinco años. Con dos o tres reformas muy bien pensadas, dijo, se daría otro impulso a la economía.

El gobernador del banco central dijo que en México el mercado (financiero) está funcionando bien. Añadió: lo que he dicho reiteradamente es que lo que va a anclar el tipo de cambio en un nivel más bajo al del día de hoy es que estamos manteniendo fundamentos sanos, equilibrio presupuestal, una política monetaria orientada a bajar la inflación y tenemos un sistema financiero sano.

Reconoció que actualmente se presentan fenómenos de volatilidad y turbulencia en los mercados financieros del mundo como un proceso de reajuste de portafolios de muchos inversionistas. Pero, confió, ese proceso terminará relativamente pronto y entonces, nuevamente, los inversionistas institucionales van a poder discriminar qué países tienen la mejor calidad crediticia, las mejores perspectivas de estabilidad y crecimiento. Estoy seguro que cuando se hagan esas comparaciones, que ya se están haciendo, los mercados financieros en México van a regresar a la normalidad.

Durante su participación en el acto de los radiodifusores Agustín Carstens afirmó que México tiene sólidos fundamentos económicos y que a diferencia del pasado, México aprendió las lecciones dejadas por las crisis anteriores y que ahora no hemos sufrido las severas consecuencias que hoy padecen las economías avanzadas.

Citó por ejemplo que nadie nunca imaginó que muchas economías avanzadas tuvieran un riesgo país superior al mexicano, por ejemplo Francia o España, que en los últimos dos meses ha tenido ese indicador al doble del de México, así como Italia. Ahora los mexicanos, añadió, pueden estar seguros de que no existen problemas fiscales y, tras décadas de no tener certidumbre en el manejo macroeconómico del país, ahora estamos beneficiándonos de una política (económica) que no fue resultado de la suerte.

A una pregunta del moderador de si México podrá seguir creciendo, el gobernador del Banco de México respondió:

“Realmente nuestro sector exportador está funcionando muy bien; somos competitivos, las exportaciones a Estados Unidos están creciendo, con sus vaivienes, alrededor de 20 por ciento. A destinos diferentes crecimos, cerca de 30 por ciento. Creo que si vamos a tener la capacidad de seguir ampliando nuestra penetración en Estados Unidos. Pero también no hay que olvidar a nuestra economía interna. Tenemos un sistema bancario bien capitalizado, hay recursos, ahorita no es negocio para los bancos invertir en Cetes (Certificados de la Tesorería), sino prestarles a las familias, a las empresas, invertir en vivienda. El crédito bancario está creciendo a tasas bastante altas.