Este martes, 41 personas murieron asesinadas o en enfrentamientos, ya sea en hechos constitutivos de delincuencia organizada o en la persecución de la misma. Entre las víctimas están un agente de Monterrey, Nuevo León, y un comandante de la policía municipal de Santa María del Oro, Jalisco.

En Matamoros, Tamaulipas, el consulado de Estados Unidos, a cargo de Michael Barkin, emitió una declaratoria de alerta a causa de las intensas batallas ocurridas entre militares y criminales en esa ciudad. A los estadunidenses avecindados en la frontera les recomendó no cruzar al lado mexicano.

Desde las 17:30 y hasta las 19:15 horas de ayer hubo enfrentamientos en el cruce de 12 y Diagonal, e incluso bloqueos en el primer cuadro de Matamoros, dice el texto divulgado por la legación, donde señaló que estas acciones no dejaron ningún herido, pero hubo dos muertos.

Por otro lado, en Reynosa, otro enfrentamiento entre militares y sicarios causó la muerte de una persona. A 50 kilómetros de allí, en Río Bravo, un hombre murió durante un ataque con explosivos contra los comercios Crazy Taco y Cine Azteca. En Ciudad Victoria, un artefacto explosivo estalló en el patio de un almacén de la Comisión Federal de Electricidad donde había transformadores aún no utilizados, informaron fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública.

Asimismo, en Jalisco, Ramiro Ochoa, comandante de la policía de Santa María del Oro, fue encontrado muerto en una carretera que comunica ese municipio con Michoacán. El 19 de septiembre pasado fue levantado por un comando armado. Por otro lado, personal militar localizó un narcolaboratorio y decomisó más de una tonelada de sustancias químicas en las inmediaciones del poblado Las Pilas, municipio de Tamazula.

Por lo que hace a Nuevo León, en la colonia Loma Linda de Monterrey un policía estatal fue acribillado en un automóvil BMW placas SCH-7377. Además, en Ampliación Nogales fue localizado un campamento donde supuestamente un grupo criminal mataba a sus víctimas.

En el estado de México fueron asesinadas siete personas; una de ellas fue identificada como Ernesto Sánchez Domínguez, de 24 años de edad, quien perdió la vida cuando se encontraba con su padre, Mario Onofre Sánchez, policía de la Agencia de Seguridad Estatal, quien resultó herido en una pierna. Asimismo se reportó la muerte de Paula Ruiz Mendoza, coordinadora de la sección 3776 del PRI en Nicolás Romero, quien fue ejecutada a tiros en la colonia Benito Juárez. Tres personas más fueron ultimadas en Tultitlán y dos en Nezahualcóyotl.

Además de estas 13 muertes, otras 28 personas murieron en enfrentamientos o asesinadas: 12 en Guerrero –en Acapulco se hallaron cinco cabezas humanas en la colonia Garita, a 60 metros de la primaria Benito Juárez–, seis en Coahuila, cinco en Chihuahua, tres en Nayarit y dos en Sinaloa.

Finalmente, elementos del Ejército Mexicano aseguraron 25 kilogramos de cocaína y un kilo de heroína en un punto de revisión de la vía México-Nogales, cerca del municipio de Opodepe, al norte de Sonora. Personal adscrito a la cuarta Zona Militar detectó la droga en un tractocamión. La unidad y su conductor fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal en Hermosillo.