Nueva York, 22 de septiembre. Las delegaciones de Estados Unidos y de varios de sus aliados de Europa se retiraron este jueves de la sala de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) al negarse a escuchar fuertes críticas que les hizo el presidente iraní Mahmud Ajmadineyad, quien acusó a las potencias occidentales de violar la ley internacional y de llevar a cabo guerras y perpetrar genocidios.

Primero salió la delegación estadunidense y a continuación la siguieron otros representantes de la Unión Europea como Alemania y Francia, en una acción coordinada, cuando en su discurso de 30 minutos ante el foro mundial el mandatario iraní los acusó de colonialistas, de esclavizar África y de dominar el Consejo de Seguridad de la ONU.

Criticó el papel de Estados Unidos y sus aliados en las guerras y las crisis financieras y reclamó que paguen indemnizaciones por la esclavitud que impusieron. Apoyan oficialmente el racismo, aseveró, y debilitan a los países a través de intervenciones militares y destruyen sus infraestructuras para saquear sus recursos y hacerlos más dependientes.

Ajmadineyad dijo que proclaman su poder e insisten en imponer sus estilos de vida a los otros, y que quienes se hacen llamar democracias libres son en realidad las raíces del mal.

Arremetió contra la arrogancia y las armas de la OTAN, criticó a Washington por haber ordenado matar a Osama Bin Laden en vez de llevarlo ante la justicia, preguntó qué país gasta un billón de dólares en armamento y quién lanza bombas pero no suministra alimentos a los que se mueren de hambre en Somalia.

El mandatario de la república islámica acusó a los medios de comunicación de hallarse bajo una esclavitud imperialista y silenciar a cualquiera que ponga en tela de juicio el Holocausto y los sucesos del 11 de septiembre de 2001.

Subrayó que los ataques del 11-S fueron el pretexto para invadir Afganistán e Irak, y que el Holocausto es utilizado para suprimir las naciones independientes, cometer crímenes y suministrar dinero a los sionistas en Israel.

Mientras tanto, en una entrevista de prensa Ajmadineyad dijo que Irán detendría su producción de uranio levemente enriquecido si Occidente se lo proporciona.

En fuentes diplomáticas trascendió que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, habría urgido a su colega iraní para la reciente liberación por Teherán de dos ciudadanos estadunidenses.

También ante la Asamblea General de la ONU, el primer ministro de Gran Bretaña, David Cameron, exigió acciones más duras contra los dictadores, a quienes no identificó.

En tanto, el gobierno de Chile, en voz del presidente Sebastián Piñera, apoyó el Estado palestino, mientras que Ollanta Humala, mandatario de Perú, también abogó por el reconocimiento de Palestina, y además demandó el fin del bloqueo a Cuba.