Los trabajos legislativos para hacer obligatoria la educación media superior sólo son decisiones sobre papel, porque primero deberían establecerse las condiciones materiales para que se haga efectiva, entre ellas, tener un proyecto de educación pública que tenga como base el Estado y no las instituciones privadas, afirmó el coordinador del Observatorio Filosófico de México (OFM), Gabriel Vargas.

El filósofo enfatizó que para hacer real el derecho de los jóvenes al bachillerato se debe acabar con cosas fundamentales como el analfabetismo. Según las cifras oficiales, en el país hay 5.3 millones de mexicanos mayores de 15 años que no saben leer ni escribir.

Así también falta atender la fuerte problemática de deserción –cada año abandonan la preparatoria 600 mil jóvenes, de acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP)– y la demanda de los alumnos a la media superior que hoy día, las autoridades ni siquiera pueden cubrir y muchísimas personas se quedan fuera.

Al aclarar que no estamos en contra de la obligatoriedad de la preparatoria, enfatizó que, primero, el Estado debe retomar la rectoría de la educación porque de alguna manera ha renunciado a ella.

Las autoridades señalan que los valores son un asunto de la familia, pero ¿de qué familia hablan, de la que han fragmentado por razones de la crisis y que han tenido que migrar a Estados Unidos, de las personas que no han educado, de la crisis familiar que se vive en este momento?

Lo que quiere hacer el gobierno es retirarse de su responsabilidad y adjudicarle a la familia y a la Iglesia estos temas. Por ello, también se requiere una reafirmación del carácter laico del Estado mexicano.

En este esquema neoliberal, la educación se ha dejado en manos de otras instancias privadas, insistió. En este sentido, el OFM analiza si es legal o no que las universidades autónomas se pongan a disposición de una asociación privada como es el Consejo para la Evaluación de la Educación del Tipo Medio Superior (Copeems), instancia que ahora valorará si las universidades integran o no las disciplinas filosóficas en sus bachilleratos, ya que de acuerdo con las autoridades educativas no se le puede exigir a la Secretaría de Educación Pública (SEP) que ejerza la facultad de incluir estas asignaturas en los planes de estudios.

Por su parte, el Observatorio de Política Social y Derechos Humanos manifestó que aunque existen 15 mil 110 instituciones de educación media superior y 6 mil 289 registradas para el periodo 2010-2011, lo anterior no se traduce necesariamente en un mayor grado de acceso a la educación y en generar mayores capacidades para la inserción al mercado laboral en el largo plazo.

En referencia al reciente reporte sobre la educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), manifestó que el problema de desempleo entre los jóvenes manifiesta un problema estructural dentro de la economía mexicana y, por lo tanto, de una inconsistencia del Estado para tratarlo.