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Cuantifican mil 250 casas dañadas; sigue reconstrucción del bordo

Entregan en Cuautitlán $5 mil a cada una de las mil 450 familias afectadas por inundación
Corresponsal
Periódico La Jornada
Domingo 11 de septiembre de 2011, p. 30

Cuautitlán, Méx., 10 de septiembre. Al menos mil 450 familias afectadas por la inundación de sus viviendas, debido a la fractura y desbordamiento del río Cuautitlán en los municipios de Teoloyucan y Cuautitlán, recibieron este sábado un apoyo inicial de 5 mil pesos en efectivo para alimentos y pago de rentas o alojamiento.

El secretario de Desarrollo Social del gobierno del estado de México, Alejandro Ozuna Rivero, y el alcalde de Cuautitlán, Francisco Fernández Clamond, coordinaron la entrega de los recursos federales y estatales de una bolsa de 7 millones 250 mil pesos. Los damnificados hicieron largas filas para recibir los apoyos económicos.

Ozuna Rivero aclaró que este no es el apoyo total y definitivo pues durante la siguiente semana serán distribuidos los recursos para la reposición de muebles y enseres domésticos, aunque todavía no se fija el monto económico que se habrá de entregar.

A una semana de las anegaciones este sábado no había una cifra oficial de damnificados. Las autoridades cuantificaron mil 250 casas afectadas y mil 140 familias, pues en la zona ejidal había más de una familia por vivienda; pero agregaron que el censo se sigue levantando y la cifra podría elevarse las próximas horas, de cualquier forma dijeron que la ayuda será destinada para todos los afectados.

En tanto, personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) e ingenieros de la constructora Ica, continuaban trabajando en la reconstrucción del bordo y aunque el desbordamiento ya fue controlado y sellado, se pretende levantar un dique a una altura de seis metros.

A su vez, personal de la Conagua y de la Comisión de Agua del estado de México, con bombas de extracción y mangueras sacaban el agua acumulada en la laguna artificial, y la canalizaban al Río Cuautitlán. Los niveles máximos de aguas anegadas tenían 40 centímetros de altura, cuando hace una semana superaban los dos metros y medio en interiores de viviendas contiguas al afluente.

Entre las aguas pestilentes se observan cadáveres de perros, gallinas, un caballo, borregos y hasta un pony, en proceso de putrefacción. Colonos pidieron el levantamiento de los animales muertos, y alertaron por la aparición de enjambres de moscos en la zona.

A diferencia de fraccionamientos siniestrados por inundaciones, como Valle Dorado, en Tlalnepantla, o Los Agaves de Tultitlán, en comunidades de Cuautitlán y Teoloyucan, hasta este sábado no había cuadrillas de policías de la Agencia de Seguridad Estatal o del municipio, limpiando calles; tampoco se dotó de pipas de agua, no había paquetes de escobas, de cloro ni de jabón. Incluso, el gobierno del estado dispuso montículos de cal en calles y cerradas de las comunidades, pero a falta de palas no era usada.