foto: HUGO CIFUENTES

Apuntes del camino del Pima

Keith Ekiss

Mitos de origen

Habitualmente no es humano uno de los padres.
Los hijos aparecen sin que se hable de sexo.

Dios crea del lodo a la mujer y al hombre.
Un hombre da a luz por el pene
    lo que provoca un diluvio.

A otro le salen plumas pero no puede volar.
Hay estrellas porque alguien las escupió.

Las lágrimas de un niño forman un lago
donde el padre se ahoga.

El océano es una larga serpiente verde
enrollada en el mundo.

¿Cuáles fueron las primeras cosas en la Tierra?
La gobernadora, las hormigas negras.

El agua brotó de raíces y muñones de árbol.
La lluvia la trajo de vuelta. Luego fue blanca,
    luego sangre.

Dios salvó a las aves y los animales.
Trepen las ramas, vivan en el agua.

Coyote se escabulló dentro de una flauta.
Un pájaro colgó su pico en el cielo.

Casas pima (ca. 1850)

La casa queda concluida cuando soporta el peso
de un hombre bailando en el techo en tiempo de cosechas.
El marco es de la madera de un álamo, porque
las garzas canturreaban ahí. Los soportes curvos de sauce,
se cubren de granos y paja,
bejuco y varas de maíz, cáscaras y desechos.
Entonces la morada se cubre y entierra.
El montículo parece una tumba.
¿Por qué una casa habría de ser más alta que un hombre?
Vientre redondo. Una cortina bordada es la puerta.
La gente duerme con la cabeza hacia el este.
Por la mañana siempre hay faena con los conejos.
Si un niño muere, el pima quema la casa
y construye otra.

El bastón calendario

Oído de Búho clavaba su bastón en el suelo
para registrar los acontecimientos
—cometa, solsticio, la vía del tren, un nacimiento.
Los invasores nunca quemaron las casas.
Nada de sábanas para los contagiados,
ni ametralladoras, ni tratados.

Los soldados ociosos mataban el tiempo
haciendo torneos con los nativos,
los caporales ganaban el esprint, los pima
las distancias largas.
Por muy rápido que corrieran los niños
jamás alcanzaban al río.

Qué se perdió, pescar con las manos,
las trenzas de bejuco en el río.
Qué queda, refranes para lamentar la partida:
Nos sobrepasaron los cuervos.

Apuntes del camino del pima

Nadie me dijo que le pertenecía a la Tierra.

Cambié de tribu año tras año:
cheroki, cucapá, pueblo, mojave.

Que las nubes parezcan espíritus
no prueba ninguna religión.

El distante batir de tambores
era sólo truenos.

Las carretas formaron círculos
que se volvieron colonias.

Tostadas de canela, leche fría, blusas de domingo.

Un día empacamos nuestras pertenencias
y manejamos hasta que empezó a nevar

Keith Ekiss, poeta estadunidense, se dio a conocer con un memorable primer libro, Pima Road Notebook (Apuntes del camino del pima, Western Michigan University, 2010). Entre recuerdos familiares y zambullidas profundas en las praderas y el desierto, destila con sobriedad la esencia de ese camino a través de grandes extensiones en el sur de Estados Unidos. Históricamente los pima, hay que recordar, se aliaron con los conquistadores, en particular para combatir a sus vecinos apaches. (Traducción del inglés: HB).

En memoria de Jan de Vos

Mikeas Sánchez

Ahh! te’ kaku’y myojnabiabü’is

mij’ ngoso’ yagbajk unej’se
yajk’ tsutspabü’is paajk’paajk
jyo’kobyasen’omo
¿Tiya’ jok’pa?

Ay! de la muerte que te cubre

los pies como a un niño desamparado
que te amamanta dulcemente
mientras esperas
¿Qué esperas?

Maka mini’ te’ kaku’y

y maka mbyare’ mij’ ün’güy’omo
maka mbyare’ mij’ dujk’ijs myuka’omora’m
jiksekande te’ yüjk’pü tandan’ijs
makabü chyajme juchek’ maka ngiae
Jiksekande’ ma’bü jambü’i mij’ nüyi’
Jiksekande’ maka dyuki’ tumü mabaxi’
te’ mabaxi ja’ tyujkübü tsayi’kam
te’ mabaxi yagbajk’unes’ñye
y ñyagbajk’une mareke’ mijtsi

Llegará la muerte

y te encontrará en tu cama
entre los hongos que habitan tu casa
o en el recuerdo de la mariposa negra
que anticipó tu ausencia
Entonces olvidarás tu nombre
y te volverás sueño
el sueño de una tarde no contemplada
o el sueño del niño desamparado que fuiste
y no has dejado de ser

Mikeas Sánchez, poeta y narradora zoque nacida en Tujsübajk (Río de Agua Verde), municipio de Chapultenango, Chiapas, desde pequeña fue desplazada por la erupción del volcán Chichonal. Autora del poemario Tumjama Maka Müjsi (Y sabrás un día, 2006) y ya conocida por los lectores de Ojarasca (diciembre de 2007), actualmente dirige una radio indígena en Copainalá.