El cineasta mexicano Kyzza Terrazas participa en la Semana de la Crítica, en Venecia
Lunes 5 de septiembre de 2011, p. a14
La película El lenguaje de los machetes, del director mexicano Kyzza Terrazas, es el único filme mexicano que participa en el Festival Internacional de Cine de Venecia, dentro de la 26 Semana Internacional de la Crítica, que comenzó este miércoles y concluirá el próximo 10 de septiembre. En entrevista con La Jornada, el realizador dice: “La sección en la que participo, que consta de siete operas primas, me parece el hábitat natural para una película como la mía, porque además de ser mi primer largometraje la eligieron quizá por su aspecto formal y de contenido. Creo que es una película frontal y honesta”.
El lenguaje de los machetes, escrita por Terrazas, está protagonizada por el actor y músico Andrés Almeida y por la ex ultrasónica y cantante Jessy Bulbo, quien incursiona por primera vez en la actuación. En ella se cuenta la historia de la pareja formada por Ray y Ramona, quienes tienen conciencia social y quieren cambiar el mundo, pero al mismo tiempo viven entre los excesos de la fiesta. Su relación se ve trastocada por la decisión determinante de hacer un acto radical. Todo esto desemboca en una tormenta interior en los jóvenes, parte medular de la historia: una pareja en un momento definitorio de sus vidas, la crisis de los ideales y la imposibilidad de una utopía, a nivel político, pero sobre todo a nivel personal. La pareja pretende, para estar siempre unida, inmolarse (cual suicide bombers) en un lugar que tiene un impacto más simbólico que efectivo, en términos políticos. Pero, como casi siempre, algo no sale como estaba planeado.
Profundo impacto
Kyzza explica el origen de la historia: “Es un proyecto en el que trabajo desde 2003, cuando estudiaba en Nueva York, cuando en México estalló el conflicto en San Salvador Atenco, a raíz del intento del gobierno federal de construir un aeropuerto en tierras comunales. Además, apenas un par de semanas después de que llegué a Nueva York sucedió el ataque a las Torres Gemelas; estos dos sucesos tan disímiles e incomparables provocaron una profunda impresión en mi forma de comprender y criticar las políticas de Estado, las luchas subversivas y la actitud general de rebeldía joven ante el status quo. Para aquel momento el tema de mi trabajo en cine y literatura ya se perfilaba como uno que trataba de responder a la relación entre la esfera de lo político, los ideales, y la vida personal, sobre todo la vida en pareja. El lenguaje de los machetes, frase acuñada por el ex senador Diego Fernández de Cevallos al referirse a la postura de los integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, es un intento más de explorar esa compleja relación. Sobre todo partiendo de algunas premisas: la esencial injusticia que pervive en el mundo, las actitudes de rebeldía frente a ello, y el anhelo de un mundo mejor, sobre todo, más justo”.
El también escritor precisa: “El lenguaje de los machetes además es una historia de amor. Y como cualquier historia de amor, por lo menos en cierta vena de la tradición occidental, es trágica. La tragedia se encuentra en el corazón del concepto de amor que la cultura occidental ha construido desde la Grecia antigua. ¿Por qué? Porque, en cierto sentido y como muestra Platón con el mito del andrógino, en El banquete, resulta imposible completar el amor, pues nunca podemos ser el otro. Esto de alguna forma también hace eco en las luchas sociales y las actitudes rebeldes: a pesar del deseo y la entrega de los seres humanos para transformar las sociedades, los resultados son francamente pobres. El amor, el deseo de transformar la realidad y los fracasos de ambos son, pues, los grandes temas de El lenguaje de los machetes”.
Acertada decisión
Acerca de la elección de Jessy Bulbo como protagonista de su cinta, dijo: En mi opinión fue una decisión acertada, porque le imprimió al personaje de Ramona un cariz muy natural, algo que no creo poder haber encontrado en una actriz. Conozco a Jessy hace muchos años y en un principio me acerqué a ella con la intención de que colaborara en la composición de la música, ya que el personaje que interpreta tiene un grupo de rock conformado por chicas. Tenía en mente, también, que interpretara quizás a uno de los personajes secundarios, pero a la hora de hacer algunas pruebas me sorprendió su naturalidad, la forma en que se relacionaba con la cámara y algo sorprendente que le imprimía a Ramona. A pesar de que ella no era actriz, seguí mi instinto y decidí que debía interpretarla. Al principio, Jessy estuvo algo insegura y reticente de aventarse el paquete, pero estuvo contenta con la idea y creo que fue, de nuevo, uno de los grandes aciertos de la película
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A la pregunta de si es necesario abordar estos temas en el cine en las condiciones actuales del país, dijo: Uno no necesariamente mide los tiempos cuando hace una película. Pero, en términos generales, viendo la situación del mundo, no sólo de México, me parece muy pertinente explorar el fenómeno del terrorismo. ¿Por qué no habríamos de hablar de ello si es moneda corriente? Defino la película, a veces, como un ejercicio de autocrítica; en el sentido de que intento poner, de forma honesta, algo de lo que soy para que sea factible de juzgarse. Pero su corazón yace en la melancolía nerviosa, a veces histérica, que provoca el injusto y desgastado mundo en que vivimos. En cuestiones universales como no poder ser los que queremos ser, en no poder convivir como nos gustaría hacerlo, en fracasar, a pesar del amor y las convicciones propias, incluso en lo más práctico y cotidiano
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Privilegio
Kyzza Terrazas concluye: Estoy contento e ilusionado porque mostrar la película ahí ya es un privilegio, un premio. Las expectativas son, simplemente, poder proyectar la cinta por primera vez al público y, con algo de suerte, que éste no quede indiferente ante las preguntas y emociones que transitan a lo largo del filme
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El lenguaje de los machetes se proyectará el 7 de septiembre en la Semana Internacional de la Crítica, en Venecia.