Senadores de PRI y PRD consideraron que el quinto Informe de Felipe Calderón fue triunfalista y poco real. El perredista Arturo Núñez señaló que el Ejecutivo se pasó de optimista, ya que el panorama que presentó está muy alejado de la realidad que viven los mexicanos.

Lamentó, además, que el Presidente insistiera en el error de presentar el combate al crimen organizado como una batalla o una guerra de carácter personal.

Igualmente, su homólogo priísta Carlos Jiménez Macías resaltó que Calderón insistió en un discurso alejado por completo de la situación de inseguridad, violencia y miseria en que vive buena parte de la población, para tratar de ocultar los rezagos y las promesas no cumplidas.

El Ejecutivo federal pretendió pasar por alto que no ha entregado buenos resultados a la sociedad. Nos presentó un panorama color de rosa, que no es el que vivimos los mexicanos cotidianamente, por lo que creo que su mensaje se pasó de optimismo ante el desánimo generalizado que hay, recalcó a su vez Núñez. Destacó que si bien el gobierno de Calderón ha abatido a delincuentes y a algunos capos del narcotráfico, el costo de vidas inocentes ha sido enorme, de más de 50 mil muertos.

Aclaró que el PRD y quienes se oponen al uso generalizado y permanente del Ejército en funciones de policía no están en contra de que se combata a la delincuencia organizada, como planteó Calderón.

Lo que proponen –dijo– es un cambio en la estrategia, con mayor uso de tareas de inteligencia en materia de seguridad pública, para que así el Ejército pueda regresar a sus cuarteles y progresivamente las policías se vayan equipando y modernizando, para hacerse cargo de su función natural.

Jiménez Macías dijo que el país que presentó Calderón es distinto al real. Fueron recuentos de hechos, de supuestos logros que no llegan a las familias. En el caso del Seguro Popular –recalcó–, además de que su cobertura es muy pequeña, se usa con fines electoreros, al igual que los programas sociales.

Agregó que pese a su compromiso, Calderón es un presidente en campaña, empecinado en impulsar a su partido y a su candidato, que es el secretario de Hacienda.