La Habana, 3 de septiembre. El ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), Julio Casas Regueiro, uno de los hombres más cercanos al presidente Raúl Castro y quien dirigió el corporativo empresarial militar, murió hoy a los 75 años, según un anuncio oficial.

Por ahora se desconoce el nombre del nuevo titular de defensa, pero hay dos personajes ubicados en la antesala del despacho principal de las FAR: Leopoldo Cintra Frías, viceministro primero (70 años), y Álvaro López Miera (67), jefe del Estado Mayor General. Ambos son integrantes del Buró Político del Partido Comunista y del Consejo de Estado y tienen el mismo rango de Casas: general del cuerpo de ejército (tres estrellas).

Casas murió de un paro cardiorespiratorio, según la nota oficial. De muy escasa actividad pública, el ministro de las FAR apareció en la televisión hace un mes, al recibir a su colega de Angola. Diplomáticos extranjeros que tuvieron contacto con él durante los últimos años notaron que tenía severas dificultades para caminar.

Además del muy sensible cargo de ministro de las FAR, quedan vacantes también las posiciones que ocupaba Casas como uno de los 15 miembros del Politburó y uno de los cinco vicepresidentes del Consejo de Estado.

Casas se unió a Raúl Castro desde la guerrilla de la década de los años 50. Después del triunfo de la revolución de 1959 pasó por la policía y ascendió en los escalones internos de las FAR. Estuvo en la retaguardia durante la intervención cubana en Etiopía en los años 80 y encabezó una región militar y la aviación en la isla.

Pero su fuerte fue la administración, donde aprovechó su ex oficio de contador bancario. Casas llegó a tener la capacidad excepcional de vetar las decisiones económicas de Raúl Castro dentro de las FAR, según reveló el actual mandatario, al ilustrar el grado de confianza que privó entre ambos.

Raúl Castro dirigió las FAR desde la creación de ese ministerio en 1959. Cuando fue electo presidente en 2008, habló así de su sucesor en la cartera militar: “Yo, que he criticado a casi todos los generales de las fuerzas armadas, y (que) en las reuniones también me he criticado (…) no recuerdo haberle hecho durante estos últimos 50 años ninguna crítica de consideración al compañero Julio Casas, salvo la de (…) ser muy tacaño”.

Agregó entonces que desde el 31 de julio de 2006, cuando asumió la jefatura de Estado y de gobierno por la enfermedad de su hermano Fidel, recayó en Casas el peso principal de las FAR.

Como el hombre fuerte de la gestión económica, Casas estuvo al frente del surgimiento y desarrollo del conglomerado empresarial de los militares, que ahora incluye operaciones agrícolas, de comercio exterior, comercio minorista, logística, turismo, servicios de ingeniería, talleres automotrices, puertos, almacenaje y una financiera. En un reflejo de esa posición, el ministro fue el segundo de a bordo de Raúl Castro en el grupo redactor de los lineamientos de la reforma en curso.

Julio Casas estuvo en el Buró Político desde 1991 y en el Consejo de Estado desde 1998, cuando ascendió de grado y recibió la condecoración de Héroe de la República. A las órdenes de Raúl Castro, fue el número dos de las FAR por 18 años, el mismo cargo que tuvo antes su hermano Senén (1934-1996), general de división que además fue ministro del Transporte.