Una treintena de periodistas extranjeros retenidos desde el domingo en el hotel Rixos del centro de Trípoli fueron liberados ayer por la tarde. Sin embargo, cuatro periodistas italianos fueron secuestrados presuntamente por fuerzas leales al líder libio Muammar Kadafi.

Los periodistas relataron que supuestas fuerzas leales a Kadafi no los dejaron salir del hotel con el argumento de que no podían garantizar su seguridad dados los combates.

Tras recuperar la libertad los periodistas se dirigieron al Corinthia, otro gran hotel de la capital libia. Reportaron que durante el trayecto no vieron enfrentamientos y que la ciudad parecía en calma y bajo control de los opositores.

El hotel, situado no lejos del complejo residencial de Bab Aziziya, fue alcanzado el martes por varias balas perdidas.

Por su parte, los cuatro periodistas italianos secuestrados viajaban de Zawiya a Trípoli, la capital, informó ayer el Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia. Se trata de tres hombres y una mujer que fueron atacados por supuestas milicias leales a Kadafi.

Dos de los secuestrados, Giuseppe Sarcina y Elisabetta Rosaspina, trabajan para el diario Corriere della Sera, mientras Domenico Quirico trabajaba para La Stampa y Claudio Monici para el diario católico Avvenire.

Según informes de la televisión estatal italiana Rai, el auto de los periodistas fue detenido, al parecer, por un grupo de civiles que abatió a tiros al chofer, de nacionalidad libia, atacaron a los reporteros y después los entregaron a varias milicias.