Los estados necesitan y merecen un presupuesto justo, transparente y equitativo, pero sobre todo la certeza de una distribución sin condicionamientos para que el país supere los retos sociales y económicos que enfrenta, afirmó el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, quien se pronunció porque el Congreso de la Unión fije condiciones en el paquete económico 2012 para evitar recortes en las áreas prioritarias y asignaciones discrecionales.

Ahora que los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados que integran la 61 Legislatura definen prioridades para analizar el proyecto de presupuesto 2012 del gobierno federal, el gobernador Duarte de Ochoa acudió a una reunión con el dirigente nacional del PRI, Humberto Moreira Valdés; sus homólogos priístas y los líderes parlamentarios del tricolor enSan Lázaro, Francisco Rojas, y del Senado de la República, Manlio Fabio Beltrones, para fijar una directriz presupuestal durante la discusión del paquete económico.

Duarte de Ochoa pidió sensibilidad y responsabilidad social a la hora de hacer las asignaciones para los estados, porque el desarrollo y el crecimiento no son negociables y los presupuestos estatales tienen que responder a las expectativas de un país comprometido con la sociedad para superar los rezagos históricos y los retos que la realidad impone, manifestó el gobernador de Veracruz.

Equilibrio de prioridades

En entrevista, expresó que comparte la preocupación generalizada de los gobernadores sobre la necesidad de reforzar partidas, evitar ajustes y recortes de última hora, pero sobre todo lograr un equilibrio de prioridades cuando se haga la asignación.

En Veracruz, dijo, la disciplina y el orden en el gasto corriente propiciaron ahorros para hacer más obras y acciones de beneficio social, y la Federación debe aplicar los mismos criterios hacia su interior para generar economías que se traduzcan en más recursos para educación, salud y seguridad.

Al recordar que el desarrollo del país es el objetivo fundamental de la Federación, consideró indispensable que las entidades tengan garantías presu- puestales que se reflejen con asignaciones inamovibles en el paquete económico, pues los vaivenes fiscales no pueden restringir la inversión pública.