El sindicato minero advierte cercano el término de su lucha, ya que se cayeron prácticamente todas las demandas penales que enfrentó su dirigencia –encabezada por Napoleón Gómez Urrutia– y está por definirse en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) el proceso que interpuso el gremio para que se otorgue la toma de nota a su líder.

Para esta organización y sus abogados, las acciones legales emprendidas han marcado la pauta para que Gómez Urrutia quede exculpado de todos los cargos que se le han imputado, ya que sólo está pendiente un último proceso, por lo que consideran que los litigios están por concluir en definitiva.

Gómez Urrutia se encuentra en Vancouver, Canadá, desde hace más cinco años, porque “en febrero de 2006, tras la explosión de la mina Pasta de Conchos, el entonces presidente Vicente Fox demandó a un gobernador que le inventara cargos al dirigente para arrestarlo como supuesto responsable del ‘homicidio industrial’ que le costó la vida a 65 mineros”.

Para el dirigente, la culminación de esta larga lucha penal y por el respeto de los derechos laborales se ve cercana, pues, según acotó, las demandas e incluso órdenes de aprehensión en contra de él y otros dirigentes mineros: se han ido cayendo una tras otra por la acción de la defensa legal del gremio y la honestidad de muchos jueces que honran su función pública y no se doblan ante esos prepotentes poderosos.

Recordó que la SCJN falló en fecha reciente en favor de la libertad de asociación y autonomía sindical, con lo cual le cortó las ilegales manos al siniestro titular de la Secretaría del Trabajo, Javier Lozano Alarcón. Queda pendiente ante el más alto tribunal la demanda de amparo que hace tres años interpusimos contra la negativa de que nos otorgaran la toma de nota.

Según Gómez Urrutia, si la SCJN es consecuente con su fallo sobre libertad sindical deberá resolver en favor de que se le otorgue el reconocimiento oficial a su dirigencia.

Con motivo del 245 aniversario de la primera huelga minera en América Latina, ocurrida el 15 de agosto de l766 en la Mina Real del Monte y Pachuca, en Hidalgo, el dirigente envió ayer un mensaje a los trabajadores en el que señaló que ésa fue la primera hazaña de una lucha de clases en México, que se dio entre un patrón, Pedro Romero de Terreros –conde de Regla–, y los mineros.

Señaló que las históricas luchas que ha encabezado el gremio en el país estimulan la que actualmente libra este sindicato por su autonomía. Nada hará que los mineros doblen las manos, aseguró, y dijo que a los mineros no les atemoriza la cargada de todo el aparato gubernamental en contra de la lucha de su gremio, las maniobras legaloides contra sus huelgas ni tampoco nos impresionan los cobardes que desde el anonimato se dedican a atacarnos desde los correos electrónicos y el Internet sin dar nunca la cara.

Prometió que este sindicato seguirá adelante obteniendo los mayores aumentos salariales de todo el país, que incluso han llegado este año en algunas secciones a 14 por ciento global y que tomarán otras medidas internas, como aplicar mecanismos transparentes de manejo de los recursos y de los bienes del sindicato, para que se manejen con la mayor transparencia y honestidad, lo cual no es una promesa, sino un anuncio. No queremos nunca más que haya traidores que roban y se aprovechan de su posición en el liderazgo sindical, sostuvo.