Ciudad Juárez, Chih., 15 de agosto. Isela Hernández Lara, de 39 años, quien cuidaba a un nieto de la activista Marisela Reyes Salazar, asesinada el año pasado, al igual que cuatro de sus familiares, fue levantada la noche del domingo en el municipio de Guadalupe, distrito Bravos, a unos 65 kilómetros al sureste de Juárez.

En un comunicado, el comité Ciudad Juárez no están solos informó que dos hijas y dos hermanos de Hernández Lara presenciaron el levantón, así como su esposo, quien fue brutalmente golpeado y ya se encuentra hospitalizado en El Paso, Texas.

Los plagiarios

Añadió que los secuestradores de Isela Hernández fueron ocho hombres fuertemente armados, quienes viajaban en una Ford Explorer negra, de cabina y media, placas desconocidas. Ellos entraron por la fuerza al domicilio de la víctima, comentaron.

El niño a cargo de Isela Hernández es nieto de Marisela Reyes, hermana de Josefina y Rubén Reyes Salazar, dirigentes sociales de Guadalupe, asesinados en enero y agosto de 2010, respectivamente, así como de Elías y Malena Reyes Salazar, levantados y ultimados en febrero de 2011.

En respuesta, dos hermanos de Isela Hernández, en el condado de Tornillo, Texas, solicitaron refugio o asilo político, al considerar que se hallan en riesgo por haber sido testigos del levantón.