La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) tiene documentado que fueron más de tres las casas cateadas en la ciudad de México durante el operativo realizado por la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) para capturar a Óscar García Montoya, La mano con ojos, que resultaron ser más graves y violentos que los efectuados en la colonia Torres de Padierna, informó el primer visitador del organismo, Mario Patrón Sánchez.

Todavía no llegamos a 10, pero son bastantes más, expresó el integrante de la comisión, quien se negó a dar detalles sobre lo ocurrido a petición de los afectados, aunque, apuntó, se trata de familias en situación de vulnerabilidad, que no han tenido el trato dado al poeta Efraín Bartolomé, la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México Patricia Magaña y la madre de esta última, Victoria Rueda.

En entrevista, manifestó que todas las acciones policiacas se efectuaron la madrugada del jueves pasado en varias delegaciones de la ciudad de México y que en algunos casos también hubo robo de diversos objetos e incluso agresiones contra los habitantes de esos domicilios, por lo que se han interpuesto más de cuatro denuncias ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).

“La situación es más grave que en los casos que ya se han dado a conocer (de la colonia Torres de Padierna). Estamos documentando y profundizando nuestras líneas de investigación. Seguimos ante una situación de sustracción de pertenencias y podemos decir que en esos lugares el operativo tuvo hasta vertientes más violentas.”

Incluso, agregó el visitador, se está documentando que en dichas acciones algunas personas fueron agredidas por los elementos policiacos, quienes buscaban a La mano con ojos en domicilios que no tenían ninguna relación con el presunto sicario.

Indagan posibles omisiones de autoridades capitalinas

Otro de los aspectos que investiga la CDHDF en torno a este caso, puntualizó, se refiere a las acciones y omisiones en que pudieron haber incurrido las autoridades de la ciudad de México. En ese sentido, explicó que la PGJEM debió presentar copia del acuerdo de colaboración entre las procuradurías y de las órdenes de cateo para llevar a cabo dichas acciones, por lo que se indaga si la policía del Distrito Federal obvió pedir dicha información para permitir la acción de la corporación.

La única excepción para que una acción de este tipo no sea arbitraria es que haya una orden de cateo, explicó el funcionario de la CDHDF, quien agregó que tampoco se puede aceptar la presunción de flagrancia, pues no se trataba de una persecución, sino que los agentes estatales entraron a dichas casas buscando cosas o personas.

En ese sentido, añadió, tampoco se puede aceptar que la policía capitalina no pudo auxiliar a las personas afectadas, específicamente al poeta Efraín Bartolomé, quien durante la irrupción en su domicilio logró comunicarse al número de emergencia 066 para pedir ayuda, pero al llegar los agentes no los dejaron pasar por el operativo. Antes debieron haber verificado que contaban con los mandamientos judiciales para llevarlo a cabo.

Mario Patrón expresó que ya ha solicitado a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y a la PGJDF diversas informaciones, como las grabaciones de las cámaras de video de las zonas afectadas, las de audio de las frecuencias de radio policiales y las del 066, entre otras.

Manifestó que es poco creíble la versión de que las autoridades capitalinas no tenían conocimiento de la acción policiaca, pues los convoyes del estado de México no pasaron nada más por la zona limítrofe entre ambas entidades, sino atravesaron gran parte de la ciudad.