Caen mercados internacionales ante el temor a una degradación de la nota al país galo
Jueves 11 de agosto de 2011, p. 22
París, 10 de agosto. El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, convocó a sus principales ministros y al gobernador del Banco Central, Christian Noyer, a una reunión de urgencia en la que ordenó a sus ministros de Finanzas y Presupuesto preparar nuevas medidas para reducir el déficit público, después de que la rebaja de la calificación de Estados Unidos llevara la atención a las finanzas francesas y se temiera la pérdida de su calificación crediticia.
Sarkozy, luego de interrumpir sus vacaciones, instó a todos los partidos políticos a que apoyen una propuesta para introducir una reforma constitucional que establezca un límite a los futuros déficits fiscales.
Francia anunciará el 24 de agosto las decisiones definitivas
adoptadas por el gobierno para cumplir el compromiso de reducir el déficit público, anunció la presidencia francesa, al término de la reunión.
La propuesta de reducir el déficit, en el marco de la preparación del presupuesto de 2012, será objeto de un primer examen en una reunión prevista para el 17 de agosto.
Las decisiones definitivas se adoptarán el 24 de agosto en una reunión entre el presidente de la República con el primer ministro, François Fillon, el ministro de Economía (François Baroin) y la ministra del Presupuesto (Valérie Pécresse)
, se informó en un comunicado.
S&P rechaza degradación
La agencia Stanadard and Poor´s (S&P), que rebajó la calificación crediticia estadunidense, dijo que la nota francesa no está en riesgo, ya que Francia ha sido más responsable que Estados Unidos en cuestiones fiscales, en tanto las agencias calificadoras Moody’s y Fitch Ratings ratificaron el miércoles la calificación AAA
para la deuda soberana de Francia con una perspectiva estable
.
El analista Nikola Swann, de S&P, afirmó que Francia tenía mejores flujos fiscales y un déficit presupuestario menor que Estados Unidos, pese a que los niveles de endeudamiento son similares por lo que descartó las preocupaciones de que Francia sea el siguiente país en la lista para bajar su nota crediticia.
Por otra parte, los mercados de valores mundiales volvieron a caer fuertemente este miércoles arrastrados por la crisis de deuda europea, especialmente de Grecia, y que eventualmente afecten al sector financiero estadunidense.
La bolsa de Nueva York cayó por tercera vez en cinco sesiones. El Dow Jones perdió 4.63 por ciento, a 10 mil 719.48 unidades; el Nasdaq 4.09 por ciento y el índice ampliado Standard and Poor’s 500 bajó 4.42 por ciento.
La bolsa de París cerró con una caída de 5.45 por ciento; la de Milán lideró las pérdidas, al desplomarse 6.6 por ciento, su peor derrumbe desde abril de 2009. El Ibex-35 de Madrid perdió 5.49 por ciento. Londres cerró con una caída de 3.05 por ciento y Fráncfort terminó con un nuevo descalabro de 5.13 por ciento, con lo que acumula 19 por ciento de pérdidas en una semana.
Las plazas latinoamericanas cerraron mixtas: Sao Paulo subió 0.48 por ciento, Santiago 2.47 y Bogotá bajó 0.11 por ciento.
En Europa los valores bancarios, en particular los franceses, sumamente expuestos a la deuda griega, sufrieron las mayores pérdidas. Las acciones del banco Société Générale, que llegaron a caer más de 20 por ciento en la sesión, cedieron al término 14.74 por ciento; BNP Paribas se desplomó 9.47 por ciento y el Crédit Agricole 11.81 por ciento.
La BMV vuelve a retroceder
El precio promedio de las acciones en la Bolsa Mexicana de Valores volvió a retroceder este miércoles después del fugaz respiro de la víspera. El índice de precios y cotizaciones, principal indicador del mercado accionario local, cerró con pérdida de 0.50 por ciento, en 32 mil 219 puntos, una caída de 162 unidades.