Sábado 6 de agosto de 2011, p. 25
Oslo. Noruega enterró este viernes a 32 de las 77 víctimas, la mitad de ellas menores de edad, de la matanza perpetrada por el extremista Anders Behring Breivik el pasado 22 de julio. Tal como se prometió, el gobierno de Noruega estuvo representado en todas las ceremonias donde su presencia fue solicitada por las familias de las víctimas. El primer ministro, Jens Stoltenberg, asistió al entierro de Monica Elisabeth Boesei, una mujer de 45 años conocida como la madre de Utoeya
, por ser la persona encargada de organizar desde hacía 20 años el campus de verano de las juventudes laboristas en dicha isla, donde irrumpió Breivik armado y mató a 69 personas. Presentándose como un cruzado
en guerra contra la invasión musulmana
y el multiculturalismo en Europa, Behring Breivik, de 32 años, permanece en detención provisional en una cárcel de alta seguridad.