La regiomontana advirtió en entrevista: el concurso Nuestra Belleza está lleno de trampas
Otras ex reinas me apoyan y dicen que hablarán de sus malas experiencias
, indicó la joven
Sábado 6 de agosto de 2011, p. 8
Monterrey, NL, 5 de agosto. Cynthia de la Vega Oates, recién destronada de Nuestra Belleza Mundo México 2011, advierte a las jovencitas que quieran entrar a concursos de este tipo que vayan muy conscientes de que no todo es color de rosa, pues en su caso, se le ofreció una vida de reina y le dieron trato de Cenicienta. Es algo que está lleno de mentiras y trampas
, afirmó en entrevista.
No obstante, señala, “para mí ha sido una lección de vida, algo doloroso de lo que he salido con muchísima fuerza; pero me pega a ratos y he llorado demasiado. Viví la esperanza. Me queda dar ejemplo, testimonio, para las demás niñas que quieran entrar.
Tenía una idea totalmente diferente de lo que iba a ser esta experiencia y, bueno, pues ahora simplemente veo la realidad de las cosas; sé que esto no es más que un negocio
, comentó De la Vega. Pero, dijo, volvería a participar. Creo en los concursos, no en la organización de Nuestra Belleza México.
En 2008, a los 16 años, ganó y representó a México en el Elite Model Look, de Sanya, China, donde estuvo entre las favoritas.
No todo es real, como se dice
Cynthia menciona que Nuestra Belleza México, concurso que organizan Lupita Jones y Televisa, tiene diversas irregularidades que desencantan a las participantes y, en su momento, algunas que le han expresado su solidaridad también hablarán sobre sus malas experiencias.
Nuestra Belleza ofrece un premio económico, pero lo da en forma de honorarios, por mensualidades, y con el carro que ofrecen es igual, está a nombre de Televisa y una vez que terminas el reinado, se hace el cambio de propietario; hay ciertas cosas, ilegalidades; no todo es muy real como se dice
, expresó.
Agregó que el último pago que recibió fue en junio, porque a partir de julio ya no hubo ningún ingreso. A partir del 13 de julio, cuando Lupita Jones le notificó que sería sustituida y le otorgó 15 días de gracia
, tuvo que moverse en taxi, pagarlo de sus recursos, al igual que hospedaje y alimentación por las noches que permaneció en el Distrito Federal.
Además, no estaba hospedada en algún hotel de lujo o en un departamento, porque la gente piensa muchas cosas
, e imaginan glamur en torno a las reinas de belleza: ella vivía en una casa de asistencia, con una familia, donde éramos muchísima gente
, y debía lavar su ropa y cocinar los alimentos que guardaba en una sección del compartido refrigerador.
Para una joven de clase media alta que estudió la preparatoria en el Tecnológico de Monterrey –próxima a inscribirse en la Universidad de Monterrey para seguir la una carrera en la Economía o Relaciones Internacionales–, lo que vivió del 17 de enero de 2011, cuando inició su preparación para el concurso de Miss Mundo 2011, en Londres, Inglaterra, hasta el 13 de julio, cuando Lupita Jones le notificó la destitución, la estancia que le ofrecieron en el Distrito Federal, era algo “totalmente diferente a lo que yo estaba acostumbrada; yo contaba con el cariño, el apoyo, el amor de mi familia; entonces fue difícil salir de mi ciudad y viajar, estar sola, cocinar, lavar…”
Esas actividades no le causan ningún problema, porque lo puede hacer y algún día, dice, tendrá un hogar y constituirá una familia, pero se le hizo creer otra cosa y se le hacía muy cansado, porque las actividades dedicadas a su preparación empezaban a las 6:30 de la mañana y terminaban a las 21 horas, por lo que no le quedaba tiempo para más. Asimismo, dice, frecuentemente debía cumplir compromisos propios de Nuestra Belleza Mundo México, donde debía presentar su mejor cara, sin importar lo cansada que estuviera.
Estos problemas los viví desde que gané; fui algo así como sentenciada a que tenía que bajar de peso, y siempre detrás de mí, de mi fortaleza: hubo ese sentimiento de que a veces por dentro estaba hecha pedazos, pero tenía que aparentar otra cosa.
Ante su destitución y lo que ha contado sobre el certamen, espera que las participantes de futuros concursos lleguen más conscientes sobre lo que les espera. Simplemente digo que lo piensen y sepan a lo que van, que lo decidan muy bien, porque yo no estoy en contra de los concursos de belleza, pero que ya vayan preparadas y mentalizadas a lo que se van a someter y que pueden llegar a vivir, que sepan que no es un cuento de hadas, como pudiera pensarse.
Quiere dejar precedente
Quizás la actitud que ha asumido, dice, sirva también para que haya un cambio en la organización de estos concursos, que haya más respeto en los compromisos de los organizadores, porque se supone que los premios se entregan y son tuyos, pero hay muchas trampas
.
Expresa que el apoyo recibido de sus seguidores, es lo que le ha dado fuerza para dar la cara, para luchar y no quedarme callada. Soy la primera reina de la belleza que expresa su sentir sobre las cosas que no le gustan de estos concursos, porque a mí me han negado la oportunidad de terminar un proceso.
Pero debido a esto, afirma, “he recibido llamadas de ex reinas que me han dado todo su apoyo y me han dicho: ‘somos hermanas del mismo dolor y lo entiendo, yo en su momento hablaré también, pero aún no estoy lista’.
No es fácil dar la cara, pero cuando uno dice la verdad no hay nada que temer, porque lo que a mí se me notificó es algo con lo que voy a ser señalada y voy a cargar de por vida. El peso es algo que a las mujeres nos importa, nos afecta y, bueno, sé que es un tema muy controversial.
No es más que un negocio
Cyinthia dice que quisiera saber qué hay atrás de su destitución, porque la señora Jones le notifica una cosa el 13 de julio (que no había bajado de peso), luego dijo que fue por indisciplina. “¿De qué se trata?, hay algo personal en mi contra, porque de mi parte nunca hubo mala actitud, sé que esto es un negocio, pero desconozco los intereses que hay detrás de esto.
“Hay mucha gente que ha dicho que ya aburrí, que ya me calle, pero no se vale, porque tengo 19 años, mi vida apenas comienza y tengo que dar la cara para limpiar mi imagen de algo que no es real, es una difamación.
Después de esto sé que la vida sigue, hay más propuestas de trabajo, simplemente me han quitado un nombramiento y un título, pero sigo siendo la misma, con la misma personalidad, características y cualidades, el talento aquí está.
Pero acepta, “estaba súper ilusionada, tenía el sueño de ser la primera mexicana en traer el triunfo a México, porque no ha habido mexicana Miss Mundo, y al parecer yo iba muy bien, era una fuerte candidata, porque si investigan en Internet, foros y blogs, yo figuraba como una de las máximas favoritas para ganar el concurso, pero tristemente mi sueño me fue arrebatado”.
En suma, dice, se le ofreció una vida de reina, y le dieron trato de Cenicienta. La verdad es que hay muchas cosas detrás de todo esto y no todo es color de rosa, no todo lo que brilla es oro; ese es otro asunto, tengo que pensar las cosas, ser muy inteligente en qué voy a decir, ya próximamente conocerán todo lo demás. A lo mejor escribo un libro: hay muchísimo que contar y qué decir.