Los secretarios de Comunicaciones y Transportes, Dionisio Pérez Jácome, y del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón, se reunirán la próxima semana con los grupos de inversionistas interesados en la compra de Mexicana de Aviación, a fin de aclarar si cuentan o no con el dinero para realizar la inversión porque hasta ahora ha habido más voluntad que recursos, dijeron.

A su vez, los trabajadores de tierra de esa aerolínea rechazaron toda posibilidad de decretar la quiebra de la misma. A 11 meses de suspendidos los vuelos –acusaron– ha faltado voluntad política del gobierno para resolver el problema.

El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Transporte, Transformación, Aviación, Servicios y Similares (Sntttass), Miguel Ángel Yúdico, denunció que hay fuertes presiones del resto de las aerolíneas, principalmente de Interjet y Aeroméxico, para que Mexicana no regrese a volar.

Y Lozano Alarcón, titular de la STPS, advirtió que dadas las circunstancias y el tiempo transcurrido, el juez podría estar reuniendo información para determinar la quiebra de la empresa, lo cual no es deseable.

En conferencia de prensa, el funcionario también advirtió que el gobierno podría emprender acciones legales por presuntos fraudes cometidos por Gastón Azcárraga durante su gestión al frente de la empresa.

Pero los trabajadores de Mexicana están muy alarmados. Declarar en quiebra a la compañía, dijo Yúdico, representaría una pérdida de más de 8 mil 500 empleos directos, y cien mil más de forma indirecta. Además, la salida de las tres aerolíneas que conforman el grupo de Mexicana –Click, Link y Mexicana de Aviación– ha representado un saldo negativo para la industria turística mexicana que, a su vez, ha impactado notablemente al resto de la economía nacional.

Denunció nuevamente la venta fraudulenta del edificio Torre de Mexicana, ubicada en la avenida Xola, de la ciudad de México, por un valor tres veces menor que su avalúo catastral.