El uso del anabólico fue prohibido desde 2000; sin embargo, no se sanciona al infractor
Cada kilo de la sustancia sirve para 50 toneladas de alimento, cuando lo legal son ocho
Martes 2 de agosto de 2011, p. 35
A más de una década de que fue prohibido el uso de clembuterol para la engorda de ganado, la sustancia se sigue usando por debilidades institucionales y porque el uso del anabólico deja ganancias de 30 por ciento a tablajeros y ganaderos, advierten médicos veterinarios zooctenistas. Autoridades agropecuarias y curadores de ganado sostienen que 97 por ciento de la producción es confiable y que los alimentos de origen animal no representan ningún riesgo para la salud de la población.
Carlos Antonio López Díaz, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Educación de la Medicina Veterinaria y Zootecnia, explicó que ganaderos utilizan el clembuterol –sustancia prohibida en el país desde el año 2000–, porque hay un aumento de 15 por ciento en la musculatura del animal y, por tanto, en peso.
El “chocomilk o sales”, como es conocido entre ganaderos, es utilizado por el costo-beneficio, pues aunque es una sustancia prohibida en ciertos estados se puede conseguir cinco veces más barato que el zilpaterol, que tiene efectos similares a los del anabólico; además, cada kilogramo sirve para 50 toneladas de alimento y el rendimiento del producto legal es de ocho toneladas.
El uso del clembuterol muestra la debilidad de las instituciones, inoperancia del marco legal, deficiente coordinación interinstitucional, escasez de presupuesto y falta de voluntad política, dijo. La insuficiencia de presupuesto hace que la vigilancia sea débil; sólo se aplican mil 575 análisis en los rastros tipo inspección federal (TIF); el año pasado, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural Pesca y Alimentación (Sagarpa) detectó 111 muestras de carne contaminada y sólo aplicó 10 suspensiones, dos multas y una clausura, es decir, 98 de los infractores no recibieron ninguna sanción ya sea por falta de voluntad política, deficiencias en el marco legal o por corrupción.
La Ley de Sanidad Animal establece una pena de tres a siete años de cárcel y multas que van de 10 mil a 50 mil días de salario mínimo para quienes utilicen clembuterol. Entre 2003 y 2008 se detectaron 2 mil 35 casos, de los cuales 80 por ciento se concentraron en Aguascalientes, Zacatecas, Jalisco, Guerrero, Morelos y Guanajuato; en 2010 se registraron 297 casos de intoxicación y 12 en Aguascalientes en lo que va de este año; además de los 477 hígados de res contaminados en Guerrero.
Explicó que de 8.2 millones de cabezas de ganado que se sacrifican anualmente, 2.8 millones corresponden a rastros municipales, donde hay menos controles sanitarios.
Enrique Sánchez Cruz, director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), sostuvo que las muestras aleatorias no sólo sirven para detectar clembuterol, sino 140 sustancias que no son admitidas por los socios comerciales de México. Hay una vigilancia en los 389 rastros TIF por Sagarpa, en tanto la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) Secretaría de Salud (Ssa) está a cargo de los rastros municipales. Descartó que el uso del anabólico sea un problema grave, pues el monitoreo permite detectar los focos rojos por el uso de esa sustancia u otras causas.
Toda la carne que llega a las tiendas de autoservicio está certificada por Sagarpa y la Ssa; además hay estrecha colaboración con el servicio de aduanas y la Procuraduría General de la República para evitar el contrabando de clembuterol; en junio se incautaron y destruyeron 142 kilogramos
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Aseguró que la incidencia en el uso del anabólico va a la baja. El reporte de la Ssa establece que en más de 80 por ciento de los rastros no se detectó el uso de esa sustancia. A los engordadores de ganado que siguen utilizándola los perseguimos y evitamos que la carne llegue al consumidor
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Agregó que para desalentar el uso de clembuterol entre los productores se impulsa el programa proveedor confiable y carta compromiso, a la cual se han sumado 300 ranchos de 19 estados. El programa es voluntario y tiene como meta que los productores ofrezcan carne de ganado bovino libre del anabólico.
Ayer, en Aguascalientes, ante el titular de la Sagarpa, Francisco Mayorga, ganaderos y actores involucrados del sector cárnico firmaron la carta compromiso para evitar el uso de dicha sustancia en el estado. Las autoridades estatales se comprometieron a vigilar los cinco rastros particulares y siete municipales, además de detectar los rastros clandestinos o de traspatio.