Washington DC, 25 de julio. La Asociación de Jugadores de la NFL (NFLPA, por sus siglas en inglés) y los dueños de los equipos de la liga de futbol americano estadunidense llegaron a un acuerdo este lunes para poner fin al paro patronal de cuatro meses, y aprobaron un nuevo convenio laboral por 10 años.

El futbol está de vuelta y esas son excelentes noticias, dijo el comisionado de la NFL, Roger Goodell, quien agregó que esto ha ido por largo tiempo, en referencia a que fue el mayor receso forzado en la liga.

Tras un acuerdo con los dueños, la NFLPA presentó los detalles del nuevo convenio a los jugadores, para su votación, finalmente aprobados por representantes de los 32 equipos de la NFL. De esta manera, se despeja el camino para que la temporada comience en septiembre.

Posteriormente, DeMaurice Smith, director ejecutivo de la NFLPA, señaló ante la prensa que ha sido un proceso largo, pero nuestros muchachos se mantuvieron unidos cuando nadie pensaba que lo harían, y el futbol americano está de vuelta gracias a eso.

Los representantes de los jugadores analizaron a detalle una propuesta de acuerdo aprobada por la mayoría de los propietarios el jueves de la semana pasada, la cual puso fin al primer paro de la NFL desde 1987.

El acuerdo tentativo aprobado por los dueños estipulaba un marco de negociación para el reparto de los más de 9 mil millones de dólares en ingresos anuales que registra la liga.

Cincuenta y tres por ciento irá a los dueños y 47 a los jugadores por la próxima década, según uno de los reportes. En el antiguo acuerdo, que expiró el pasado marzo, era de 50 por ciento para cada parte.

Según el calendario de reinicio de actividades en la NFL, el martes comenzarán los canjes y las negociaciones con agentes libres, quienes podrán ser fichados a partir del viernes.

Los jugadores podrían empezar también a reportarse a las sedes de entrenamiento desde este miércoles hasta el domingo próximo.

El convenio presentado a los jugadores incluye una nueva escala de pagos a novatos, un tope salarial de 120.3 millones de dólares anuales y un fondo de ayuda entre 900 y mil millones de dólares para incrementar las pensiones de los jugadores que se retiraron antes de 1993.

Los propietarios renunciaron a su demanda de aumentar la temporada de 16 a 18 juegos, diciendo que ello no ocurrirá antes de 2013, y no sin la aprobación de los jugadores. Entre las múltiples consecuencias negativas, la disputa laboral derivó en la cancelación del partido anual del Salón de la Fama, que se efectuaba sin interrupción desde 1966 y que tenía previsto el choque entre los Osos de Chicago y los Carneros de San Luis, el 7 de agosto.

Si se mantiene la fecha prevista anteriormente por la NFL, el primer partido oficial de la campaña se efectuará el 8 de septiembre. Se calcula que la pretemporada podría arrancar el jueves 11 de agosto.