Tras 30 meses, una pareja deportada de EU recupera a sus 2 hijas bajo custodia en EU
Martes 19 de julio de 2011, p. 34
Guadalupe Chipole, directora de Atención a Huéspedes Migrantes y sus Familias, de la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades (Sederec), informó que por vez primera una corte en Estados Unidos admitió una comparecencia a distancia que permitió a Margarita Almaraz y Alfonso Mejía recuperar a sus hijas Ashanti, de ocho años, y Asheley, de cuatro, quienes estuvieron en la custodia del condado de Chester, Pensilvania, dos años seis meses.
Margarita y Alfonso, quienes viven en el Distrito Federal, residieron en Pensilvania, Estados Unidos, ocho y nueve años, respectivamente, pero fueron deportados en 2009, quedando sus hijas en custodia de ese estado, con lo que debieron iniciar una batalla legal a distancia, pues el matrimonio no podía regresar a ese país para comparecer ante la Corte.
Indicó que por conducto de la Sederec y sus abogados, el matrimonio compareció en ocho ocasiones ante la corte de Estados Unidos, utilizando el programa Skype de videoconferencia, apoyados en una computadora, cámara y conexión a Internet, en el marco formal de un juicio con toda validez jurídica.
Indicó que con este proceso a distancia se sienta un precedente histórico para la corte de Estados Unidos y para muchos migrantes mexicanos que después de ser deportados dejan asuntos legales y judiciales pendientes en aquel país, ante la imposibilidad de obtener una visa para poder ingresar al vecino país del norte.
Informó que tras el juicio se esperaba que las menores regresaran a México el lunes, aunque se ignoran con precisión, pues la Secretaría de Relaciones Exteriores ha dejado pendientes los detalles de la reunificación mientras no llegue la representante del consulado
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Indicó que el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en México supervisará el estado de salud física y emocional de las niñas, la reunificación, la necesidad de terapias o cualquier asistencia que requieran las menores.
En conferencia de prensa luego de dar a conocer lo anterior, el abogado Gustavo García Arias, quien llevó el caso en su despacho especializado en asuntos migratorios, visas y asuntos legales en Estados Unidos, dijo que no se pudieron acreditar las investigaciones por sospecha de maltrato a las menores.
Indicó que éstas se debieron a especulaciones que se generaron por problemas de traducción, de brecha cultural entre los señores (la pareja) y las trabajadoras involucradas, pero ninguna se pudo demostrar
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