Trupolis es el nombre de un espectáculo sobre una ciudad que ha cambiado arquitectónicamente desde los tiempos de los aztecas, piedra a piedra, desde las edificaciones precolombinas hasta la Torre Mayor, expresó en entrevista con La Jornada Mauro Mendoza, director de la compañía teatral La Trouppe.

Tras 15 años de su estreno, este montaje volverá al escenario a partir de hoy, domingo 10 de julio, en el teatro Banamex del Centro Comercial Zéntrika, en Santa Fe.

“Esta obra está vigente, en tanto que los que vivimos en la ciudad de México somos la suma de muchas culturas.

“Esta pieza comienza con el origen del cosmos y como con una lupa vamos a la Tierra hasta llegar a la República mexicana. Vemos la cultura azteca, las construcciones virreinales y hasta el entorno durante la Revolución. Es una historia contada con imágenes, con música. En cuanto a producción, ahora se rediseñó desde cero.

Ahora hay más tecnología, porque se aprovecha la infraestructura del teatro. Tiene muchos efectos de iluminación y el sonido es más que bueno. La ciudad sigue creciendo y es ahora una especie de monstruo. La más grande del mundo... es una mega Trúpolis. Se le ve desde el Centro Histórico, sobre el cual desde el principio señalamos que se ha ido perdiendo y ha sido adulterado, descuidado. Ahora se ha restaurado, pero tenemos problemas en áreas que se definen como mancha urbana. Es una metamorfosis que se ha ido adaptando a la modernidad. A nuestra ciudad solemos no cuidarla lo suficiente. Queda claro en la obra que no sólo somos indígenas y españoles, sino la suma de muchas culturas. La obra está vigente porque las personas la disfrutan mucho.

Payasos, títeres, música y más

Sylvia Guevara, Lady Lucas, explicó que en escena aparecen Trupo (Mendoza), ella, Toño Canica, Noni Pelusas, Moñeca, Matías, Pipirola y los titiriteros, que manejan más de 40 muñecos.

“Son de diferenets tipos de manipulación, desde los de varilla, chiquitos, hasta los gigantes, como un camello, botargas, una salsa de soya que baila salsa.

“En todos los cuadros hacemos personajes diferentes, de chinos, árabes y otros. Es un espectáculo grande –dura una hora 15 minutos–, ágil, con cuadros muy diferentes.”

Mendoza añadió que los niños que la han visto la entienden y se divierten. El reto es divertir a toda la familia, desde el más chiquito a nivel visual y el adulto con un concepto más elaborado. Todos ven de dónde venimos, cómo somos, sin fechas, ni héroes ni datos históricos, porque eso lo dejamos para el salón de clases. A 15 años de haberse estrenado por primera vez ha ido madurado en todos los sentidos. Hace 15 años no teníamos luces robóticas.

Para Lady Lucas esta obra también es interesante por el entorno social, Santa Fe, con sus edificios modernos y alrededor zonas muy populares, con caseríos amontonados.

No sólo está la gente pudiente. A nosotros nos siguen de la Portales, la Del Valle o Iztapalapa, y hasta de Toluca y Metepec.

Mendoza resalta el mensaje de observar la arquitectura de la ciudad, sus cambios a través del tiempo, y el caso interesante de Santa Fe. Somos una mezcolanza de tantas cosas y ha faltado orden. Tenemos un número donde la ciudad se retaca de anuncios, espectaculares.

Lady Lucas: “La idea es que la gente diga: ¡Guácala, qué feo! ¿Cómo que a un edificio antiguo se le pone un letrero luminoso?

Ya hoy los capitalinos sólo tiene las aceras para caminar, pero hay sitios que ni eso, por los comerciantes ambulantes. Además del miedo a salir por la inseguridad. Nosotros lo planteamos de manera divertida y los niños harán la diferencia de dónde viven. Hoy tenemos el síndrome del niño de condominio. A los niños pobres les va mejor porque viven en la orilla y tienen más espacio para correr y jugar.

Funciones en el teatro Banamex Santa Fe: domingos a las 11:30 y 13:30 horas.