Cuernavaca, Mor., 5 de julio. Dos oficiales del 21 batallón de infantería de la 24 Zona Militar fueron capturados el pasado viernes y acusados de torturar, asesinar e inhumar clandestinamente al joven Jethro Ramsés Sánchez Santana, quien desapareció el primero de mayo luego que policías municipales lo detuvieron y entregaron a agentes federales y elementos del Ejército.

Este martes Enrique Paredes Sotelo, presidente del Colegio de Abogados de Morelos, dio a conocer que asumió la defensa de ambos elementos, a quienes llama los oficiales Guerra y Guerrero, quienes fueron aprehendidos por disposición de la Procuraduría General de Justicia Militar y trasladados al Distrito Federal, donde el lunes presentaron su declaración preparatoria como parte de la averiguación previa 331/2011.

“Las autoridades de la Defensa Nacional y el juez quinto del fuero militar –quien instruirá el proceso– nos apercibieron a no dar informes del expediente porque todavía está en integración, pero de dictarse el domingo la formal prisión se iniciará el procedimiento ordinario en que se ofrecerán pruebas y habrá una sentencia”, indicó el jurista al visitar el Congreso morelense, luego de que anoche trascendieron las detenciones.

Ambos oficiales –quienes fueron llevados al Campo Militar número uno– están muy apenados por la víctima y su familia, pero se declararon inocentes de las acusaciones de tortura, desaparición forzada y homicidio calificado, expuso Paredes Sotelo, quien desestimó el cargo por presunta inhumación clandestina.

La secretaría municipal de auxilio y protección ciudadana confirmó el 6 de junio que Jethro Sánchez fue detenido el primero de mayo en la feria de Cuernavaca junto con su amigo Horacio Sánchez Castelo por los policías locales Pascual Ruiz Hernández, Adrián Alemán Barrios y Mario Bastidas López, quienes tripulaban la patrulla 2771 y dijeron haber intervenido tras una presunta riña. Según ellos, el ahora desaparecido dijo pertenecer al cártel del Pacífico sur.

Los agentes municipales entregaron a ambos jóvenes a los policías federales que tripulaban las patrullas 10618 y 10644, y éstos –según el diputado local perredista Fidel Demédicis Hidalgo– fueron apoyados por militares que llegaron en las unidades 821362, 821307 y 821303. Días después apareció Horacio y dijo que los policías lo apalearon y abandonaron un paraje dándolo por muerto, y se llevaron a Jethro.

El 5 y el 23 de mayo el poeta Javier Sicilia exigió la presentación del joven de 26 años, cuyos familiares y amigos encabezaron dos manifestaciones en Cuernavaca los días 15 y 22 de ese mes, pero cancelaron la del 2 de junio por amenazas de muerte.

Estaciones de radio de Cuernavaca informaron este martes que sus reporteros tuvieron acceso al expediente y leyeron que el cadáver de Jethro fue localizado el 7 de junio en Atlixco, Puebla, versión que negaron autoridades poblanas.

Con información de Fermín García / La Jornada de Oriente