Guadalajara, 30 de junio. Mientras el defensa del Atlas Néstor Vidrio ofreció una disculpa pública por lo sucedido el pasado día 25 en Ecuador, otro de los seleccionados separados de la Sub-22 por indisciplina, Israel Jiménez informó que también fue multado por su club, Tigres.

En la cita con los medios de comunicación, en la que no aceptó preguntas, Vidrio leyó una carta en la que evitó hablar de la visita que les hicieron algunas damas en el hotel donde se hospedaron. Como ustedes saben, el pasado 25 de junio se suscitaron hechos durante mi concentración con la selección Sub- 22, en Quito, mismos que hoy lamento profundamente y de los cuales no daré detalles, indicó.

Agregó que como cualquier ser humano, soy susceptible a cometer errores y lamentablemente cometí uno, del cual hoy me doy cuenta del alcance que tiene. Perdí la oportunidad de disputar una competencia internacional, además, demerité la confianza que se tuvo en mi persona.

El defensa, quien aceptó las sanciones impuestas por la Federación Mexicana de Futbol y el Atlas, dijo que asumía y acataba las consecuencias de mi error, y, por conducto de los medios de comunicación, ofrezco una disculpa pública a la afición, a mis compañeros de equipo y a la institución por mi indisciplina. Soy completamente consciente de que como jugador profesional debo ser ejemplo dentro y fuera de las canchas de futbol.

Por su parte, en Monterrey, Israel Jiménez ofreció una conferencia de prensa, en la que tampoco quiso explicar lo que pasó en Ecuador, ni de lo que escribió en su twitter: Una disculpa a todos, pero pues era un grupo y al final se destruyó, y por ayudar a unos compañeros la llevamos varios, que sirva de experiencia.

Jiménez solamente comentó: Tuve una indisciplina, asumí la responsabilidad con mi directiva y tuve también una multa, que es interna, es privada y tengo que aceptar las consecuencias. Es lo único que les puedo decir.

Al cuestionarle si su conciencia estaba limpia, respondió: Sí, estamos tranquilos, ahorita mi mente está en Tigres, eso ya es pasado y a darle vuelta a la página.

—¿No te sientes culpable? –le preguntaron.

—Es una indisciplina que hicimos, eso quedó en el grupo, es algo privado.

Puntualizó sí que a cualquiera le duele no jugar la Copa América, porque es un torneo importante. Pero por algo pasan las cosas, de los errores se aprende.

Alguien que piensa que lo sucedido traerá beneficios es el técnico Enrique Meza. Consideró que esto nos va a alertar, no porque seamos santos, sino porque hay momentos para todo.