Pachuca, Hgo., 29 de junio. Un Mundial Sub 17 sólo pasa una vez en la vida, definió el portero Richard Sánchez al expresar el sentir general de una selección mexicana que está muy motivada por vencer este jueves a Panamá y calificar a cuartos de final de nuestra Copa.

Los mexicanos se encuentran optimistas. Aseguran que el nerviosismo del debut ya pasó y sólo alzan los hombros cuando se les dice que su calificación ha sido con una dosis de fortuna. En el fútbol la suerte no existe. Si los rivales han fallado y nosotros hemos tenido más puntería, no es culpa nuestra, aclaró el mediocampista Jonathan Espericueta.

Tenemos el sueño de ser campeones del mundo, dijo por su parte el capitán Antonio Briseño después del entrenamiento del equipo, realizado en el poblado aledaño de San Miguel de la Higa, ya que la pertinaz lluvia inundó las canchas de la Universidad del Futbol, donde se realizan las prácticas.

El conjunto tricolor culminó su preparación con un ligero y relajado entrenamiento. Sólo tiros libres y tenis balón en los que predominó el buen humor en el conjunto de Raúl Gutiérrez, aunque aseguran que no habrá exceso de confianza para enfrentar esta noche a un rival que parece accesible.

Nosotros no nos confiamos ante nadie. Esto es un Mundial y debemos seguir concentrados y enfocados, señaló Sánchez. El portero admitió que ha tenido un rendimiento irregular, sobre todo en los centros, pero este día fue a lo que más le puso atención, porque sabe que será exigido por rivales fuertes físicamente y que buscan mucho los centros elevados.

“No he medido bien los balones, pero en eso es en lo que he estado trabajando –aceptó el jugador del FC Dallas, de la MLS–. Los nervios ya quedaron atrás, ahora sólo estoy enfocado en hacer un partido perfecto. La verdad estamos muy felices y disfrutando al máximo, porque esto sólo pasa una vez en la vida.”

Sánchez ya detuvo un penal y dijo estar listo en caso de que el partido de este jueves llegue a esa instancia, aunque confía en que podrán ganar en los 90 minutos reglamentarios.

El capitán Briseño informó que la noche del martes analizaron a los centroamericanos y tuvieron especial atención en la táctica fija para controlar a un equipo que es peligroso en tiros libres y de esquina. Sin embargo, el central aclaró que no les preocupa mucho el rival, sino lo que ellos mismos puedan hacer.

Nosotros somos el mejor o el peor de nuestros rivales. Lo que nosotros hagamos nos va a perjudicar o beneficiar, no tanto lo que haga Panamá, dijo Briseño, quien otra vez contará en el estadio con el apoyo de más de 100 personas, entre familiares y amigos.

Por su parte, Giovanny Casillas toma con tranquilidad el hecho de que lo califiquen como el mejor del Tri. Que digan eso me pone muy feliz, pero esto no es de un solo hombre: esto es un trabajo de equipo; si me ha dado resultado es gracias a mis amigos, expresó el delantero.

El jugador de las Chivas no entró en polémica y dijo que está a las órdenes del técnico para iniciar el partido o entrar de relevo. “Yo de las dos formas me siento bien. El que decide es el profe”, señaló Casillas, quien confesó querer seguir los pasos de Giovani dos Santos. Por lo menos ya tenemos un nombre parecido, dijo entre risas.

Del caso de los seleccionados expulsados de la Sub 22, Casillas sólo comentó que sí lo observan como un aprendizaje. “Ese es otro tema… pero es algo que se siente mal y ya recibirán su castigo”, expresó.

Por otra parte, este jueves se enfrentarán las selecciones de Francia y Costa de Marfil, cuyo vencedor se medirá ante el trinfador del México-Panamá.