El gobierno federal devolvió a Grupo Machado la factoría José María Morelos de Jalisco
Jueves 16 de junio de 2011, p. 27
El gobierno federal regresó al Grupo Machado el ingenio José María Morelos, que fue expropiado en 2001 junto con otras 26 factorías azucareras, en una operación en la que el grupo empresarial se comprometió a capitalizar la empresa y asumir los pasivos que arrastra, calculados en más de 950 millones de pesos.
La operación fue concretada con la entrega de los títulos accionarios al grupo azucarero encabezado por Teresa Machado, informaron fuentes de la Secretaría de Hacienda. La devolución del ingenio Morelos, localizado en el estado de Jalisco, se realizó bajo el argumento de que para el gobierno federal representa un ahorro
al ya no tener que destinar recursos fiscales para cubrir el monto de los pasivos que arrastraba más los acumulados en una década de administración del sector público.
Grupo Machado fue uno de los más afectados por la expropiación de 27 ingenios realizada en septiembre de 2001 por el gobierno de Vicente Fox. La recuperación se habría realizado a través del ingenio La Margarita, también propiedad de ese grupo empresarial, el cual se comprometió a reactivar la unidad productiva José María Morelos.
Durante los últimos 10 años el gobierno federal ha regresado a sus antiguos propietarios diversos ingenios expropiados durante la administración foxista. Uno de los últimos fue el de La Joya, localizado en el municipio de Champotón, Campeche, en marzo del año pasado. La empresa Promotora Industrial Josela, del empresario Carlos Seoane Castro, presentó una oferta de 104 millones de pesos, más el compromiso de asumir pasivos por otros 69.8 millones, la cual fue aceptada por el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), organismo encargado de los ingenios expropiados.
Algunos otros ingenios son operados por el Fondo de Empresas Expropiadas del Sector Azucarero (FEESA) debido a que todavía mantienen algún litigio jurídico con sus antiguos propietarios.
Los 27 ingenios fueron expropiados por el gobierno federal el 8 de septiembre de 2001 a raíz del desorden económico y productivo en que había caído el sector, el peso de la deuda con la entonces Financiera Nacional Azucarera y la falta de pagos a los productores cañeros.
Antes, durante los gobiernos de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas ya habían sido favorecidos con un rescate de toda la industria, el cual ascendió a más de 639 mil millones de pesos. En la administración de Ernesto Zedillo se inyectaron por lo menos otros 3 mil 500 millones adicionales para evitar su quiebra.
De acuerdo con el proceso que se siguió, Financiera Nacional Azucarera otorgó cartas de garantía a la banca extranjera para respaldar créditos para pignoración de inventarios y de avío al campo cañero por 438 millones de dólares.
Para apoyar la exportación de excedentes en 1997 y el manejo de inventarios de 600 mil toneladas de azúcar en 1998 y 1999, el gobierno federal otorgó recursos por más de 600 millones de pesos.