Conmemoran en Cuba su natalicio con Diario de un combatiente
Martes 14 de junio de 2011, p. 23
La Habana, 13 de junio. Los apuntes que elaboró Ernesto Che Guevara durante la campaña guerrillera en Cuba (1956-1958), que dieron origen a su ensayo-testimonio Pasajes de la guerra revolucionaria, serán publicados por primera vez en un volumen que empezará a circular aquí este martes, coincidiendo con la fecha en la cual el argentino-cubano habría cumplido 83 años.
Diario de un combatiente es el nuevo título que publica el sello australiano Ocean Sur, como parte del proyecto que mantiene esa editorial, en asociación con el Centro de Estudios Che Guevara de La Habana, que está a cargo de preservar el legado del guerrillero y que dirige su viuda, Aleida March.
El material recoge las primeras impresiones de Guevara sobre Cuba, su gente, la guerrilla y el proyecto revolucionario que entonces hervía en la cabeza de aquel joven médico, recién desembarcado de México, después de un recorrido por toda América Latina.
Aunque los papeles nunca se habían publicado textualmente en su forma original, su contenido ya se conoce. Con base en esos apuntes, desde 1961 Guevara publicó una serie de artículos en la revista militar Verde Olivo, en los cuales reconstruyó y analizó la guerrilla, desde la llegada de los combatientes en el yate Granma, procedente de México, en 1956, hasta el triunfo de la revolución el 1º de enero de 1959.
La serie apareció recopilada en un libro en 1963. Poco antes de salir a su campaña en África, en 1965, Guevara revisó el texto y el resultado es Pasajes…, que se convirtió en uno de los clásicos de la revolución cubana.
El Che dejó de escribir sus apuntes en febrero de 1958, según se supo durante la recopilación editorial de los años sesenta. Sin embargo, entre 1962 y 1964, cuando despachaba como ministro de Industrias, logró rehacer episodios, dibujar croquis y precisar datos, recurriendo a su memoria e interrogando a sus antiguos compañeros de armas.
De cualquier forma, el texto más renombrado de Guevara es su diario de la guerrilla en Bolivia, en la que murió el 9 de octubre de 1967.