La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Hidalgo presentó a 13 integrantes de Los Zetas y a nueve policías municipales de San Felipe Orizatlán –en la región de la Huasteca– que supuestamente daban protección al cártel. Todos fueron puestos a disposición del agente del Ministerio Público Federal.

En conferencia de prensa, Damián Canales, titular de la SSP estatal, informó de la aprehensión del director de Seguridad Pública de dicha localidad, Julio César Castillo; de los comandantes Juan Márquez Hernández y Agustín Fernández, de vialidad y de seguridad pública, así como de seis agentes, entre ellos dos mujeres.

Explicó que los uniformados fueron detenidos luego de la declaración de cinco presuntos halcones (espías) de Los Zetas, quienes fueron capturados durante un operativo realizado por elementos de la coordinación de investigación, en el que además se decomisaron cuatro vehículos, dos con reporte de robo.

Dicha operación, que se realizó el pasado domingo como parte de la ejecución de una orden de aprehensión contra José Rosario Hernández, El Chepa, acusado de dar muerte a Nabor Alberto Flores en el municipio de Huejutla, devino en un enfrentamiento, pero no hubo heridos ni muertos, sólo los cinco detenidos, incluido El Chepa.

Mientras, en Pachuca fueron arrestados otros ocho presuntos integrantes de Los Zetas, quienes percibían salarios de 4 mil pesos quincenales por reportar los movimientos del personal del Centro de Comando, Cómputo y Comunicación (C-4). Se les incautó un auto.

La niña Kimberly Montiel Castillo, de seis años, murió al recibir dos impactos de rifle AK-47 que desconocidos dispararon contra el vehículo en el que viajaba con su padre –quien resultó ileso– por calles de la colonia Águilas de Zaragoza, de Ciudad Juárez.

La narcoviolencia que afecta Chihuahua cobró la vida de otras siete personas, entre ellas Alonso Hernández Valenzuela, mando de la policía municipal, quien fue emboscado y ultimado por un comando.

En Monterrey, Nuevo León, fue atacado a balazos y con granadas el cuartel oriente de la policía, causando la muerte de un elemento y lesiones a otros tres. La jornada violenta en esta entidad incluyó también el abatimiento de dos sicarios por militares, el asesinato de un reo del penal de Topo Chico y el hallazgo de un hombre decapitado.

Dejan cadáver de un uniformado frente a Congreso de Sinaloa

En Culiacán, Sinaloa, la noche del lunes desconocidos arrojaron desde un vehículo en movimiento el cadáver de Paúl Barraza Peñuelas, agente de la policía ministerial, frente al Congreso del estado. El uniformado había sido levantado el domingo en el municipio de Guasave.

En Los Mochis, cabecera municipal de Ahome, una refriega entre pistoleros e integrantes del grupo elite de la policía ministerial dejó dos presuntos criminales muertos y un agente herido. Los agresores atacaron con bombas molotov la sede de la corporación e incendiaron cinco vehículos estacionados en los patios de la misma. Las escuelas de la zona suspendieron clases.

En Torreón, Coahuila, un comando que se desplazaba en un camión repartidor de botanas y en un automóvil irrumpió en el Osbar Sport, donde mataron a una mesera e hirieron a dos individuos. En otra punto de esa capital apareció un hombre ejecutado.

En más ejecuciones y ajustes de cuentas entre miembros de bandas delictivas, ayer murieron 7 personas en Guerrero, Baja California y Nayarit.

En tanto, en una fosa localizada en el municipio de Tacámbaro, Michoacán, fueron encontrados los restos de cuatro personas, informaron fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.

Dos cadáveres más fueron exhumados ayer de la fosa ubicada en la calle Valentín Trujillo de la colonia Valle de Guadiana, de la ciudad de Durango, con lo que suman 226 cuerpos desenterrados desde el pasado 11 de abril en siete fosas.

En tanto, en Tamazula de Gordiano, Jalisco (a 180 kilómetros de Guadalajara), anoche fueron hallados los cuerpos de cinco hombres en fosas clandestinas, informó el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.

Con información de Notimex