Finaliza gira que lo llevó también a Irlanda, Gran Bretaña y Francia
Domingo 29 de mayo de 2011, p. 21
Varsovia, 28 de mayo. El presidente estadunidense Barack Obama aprovechó su estancia en esta capital, última etapa de su gira europea, para tranquilizar a Rusia y Polonia sobre el proyecto de su país para construir un escudo antimisiles en Europa del este.
Además, el gobernante demócrata que afirmó que Polonia es un ejemplo para toda la región
por sus éxitos logrados en la promoción de la democracia y de la economía de libre mercado.
La defensa antimisiles es un tema en el que deberíamos cooperar con los rusos, ya que afrontamos amenazas comunes
, pero consideramos muy importante que la Organización del Tratado del Atlántico Norte sea la única responsable de sus propios medios de defensa
, declaró Obama, tras un encuentro con su par polaco, Bronislaw Komorowski.
Washington y Varsovia están a punto de firmar un acuerdo que permitirá rotaciones de aviones de combate estadunidenses F-16 y de transporte Hércules para vuelos de entrenamiento con los polacos, así como la instalación de una representación permanente del ejército estadunidense en territorio polaco, anunció el primer ministro Donald Tusk.
Un memorando sobre la presencia estadunidense en Polonia toma forma
, declaró horas antes el primer ministro polaco tras entrevistarse con Obama.
Tanto para Polonia como para sus vecinos, establecer fuertes relaciones con Estados Unidos es esencial para su estrategia y una forma de consolidar su independencia respecto de Moscú.
Así, Rumania y Polonia aceptaron albergar hasta 2015 y 2018 interceptores SM-3 en el contexto del proyecto de escudo antimisiles, lo que suscitó la irritación de Rusia, que ve en ello una amenaza para su propia seguridad.
Obama reiteró que el rol polaco en los planes de defensa de misiles apuntaban a contrarrestar la amenaza posible de un ataque con misiles balísticos de corto y mediano alcance desde países hostiles como Irán.
El jefe de la Casa Blanca también se entrevistó con antiguos opositores al régimen comunista y con dirigentes de los principales partidos políticos polacos.
Por la tarde, Obama tomó un avión de regreso, con lo que puso fin a una gira europea que lo llevó a visitar Irlanda, Gran Bretaña, Francia y Polonia.