Cerca de 3 mil profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) marcharon del Zócalo capitalino a la Secretaría de Gobernación (SG) para exigir la reinstalación de la mesa nacional de diálogo, suspendida el pasado 18 de mayo.

Advirtieron que de continuar la cerrazón de las autoridades federales, hay condiciones para que los maestros de Michoacán se sumen a un paro indefinido de labores a partir del próximo día 31.

Contingentes representativos de Michoacán, Oaxaca, Tlaxcala, Guerrero, Baja California Sur, valle de México y Distrito Federal permanecieron por más de dos horas en las inmediaciones de la dependencia federal, en espera de que el subsecretario de la SG, Juan Márquez Gutiérrez, reinstalara la mesa de diálogo y atendiera el pliego nacional de demandas, que incluye la cancelación de la Alianza por la Calidad de la Educación, incremento real al presupuesto educativo y abrogación inmediata de la nueva Ley del ISSSTE.

Sin embargo, esto no se concretó, lo que propició la inconformidad de los docentes, quienes bloquearon por más de una hora el cruce de las avenidas Insurgentes y Paseo de la Reforma para exigir la apertura inmediata de la mesa nacional de negociación con funcionarios que sí puedan gestionar una respuesta al más alto nivel del gobierno federal.

Jorge Cázares, secretario general de la sección 18 de Michoacán e integrante de la comisión nacional de negociación de la CNTE, indicó que el magisterio democrático del país también está hasta la madre de estas políticas hambreadoras y de deterioro sistemático del sistema educativo.

Afirmó que el gobierno federal quiere que nos regresemos a negociar a nuestros estados, a fin de recoger las migajas que les queden.