Madrid, 23 de mayo. El movimiento del 15 de mayo (15-M, en alusión a la fecha de la manifestación que originó la revuelta popular) advirtió que su actuación no se centra en los comicios municipales y autonómicos del domingo en España, en el que fue derrotado el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Por eso respondió a los que desde algunos medios de comunicación lo responsabilizan, en parte, de la derrota, al señalar que nuestro movimiento nunca ha pedido la abstención, ni el voto en blanco, ni el voto nulo, ni el voto para ningún partido en concreto.

En una jornada marcada por el impacto del resultado electoral –el dominio casi absoluto de la derecha en todo el mapa autonómico y municipal–, los acampados de la Puerta del Sol, el epicentro de la llamada revolución de los indignados, explicaron que desde la plataforma Democracia Real Ya se promueve que la gente se informe y decida por sí misma a quién entregar su voto según su ideología.

Explicaron que dado que Democracia Real Ya es una plataforma plural, la diversidad de voto es también amplia. Nuestro objetivo es mejorar el sistema electoral actual, pero hasta que ese modelo cambie, creemos que cada persona debe participar como mejor le parezca.

Aspecto de la asamblea de manifestantes que desde el domingo 15 están de plantón en la Puerta del Sol, en MadridFoto Reuters

Más allá de las elecciones, el plantón mantiene su agenda política y las prioridades de un movimiento que se ha internacionalizado y que tiene fuerte presencia en las redes sociales y en Internet.

Es decir, reclaman una reforma de la ley electoral española para terminar con el bipartidismo, una democracia más participativa que no cierre espacios a la ciudadanía, el fortalecimiento de los servicios públicos, la regulación de los mercados financieros, la transparencia de la función pública y la lucha contra la corrupción política y empresarial.

En el campamento de la Puerta del Sol siguieron los talleres, las mesas redondas, los debates y la organización popular, si bien se notó una disminución de los manifestantes y asistentes.

El temor a un desalojo de la policía a lo largo de la semana sigue latente, por lo que aprobaron en asamblea un protocolo de acción en caso de que esto ocurra.