La desatención en estos aspectos genera enfermedades, dice
Viernes 20 de mayo de 2011, p. 48
El gasto militar en México crece en mayor proporción que lo destinado a salud y saneamiento del agua, pese a que la falta de acceso sustentable al líquido y sanidad básica provoca que 50 por ciento de las camas de hospitales estén ocupadas por pacientes con enfermedades gastrointestinales y otras vinculadas con la contaminación del líquido, señalaron los integrantes de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), José Franco, Blanca Jiménez Cisneros, y Carlos Bosch.
Los científicos advirtieron que es prioritario que el gobierno federal diseñe, junto con los estatales, una política integral de largo plazo que atienda esos temas y otorgue más recursos para la educación en la ciencia, para estar en condiciones de enfrentar los desafíos actuales o se nos irá de las manos el país
.
En rueda de prensa para dar a conocer el pronunciamiento que científicos del país y el mundo compartieron ayer con naciones ricas y emergentes del Grupo G8-5, los académicos advirtieron que en 2015 la mitad de la población mundial no tendrá acceso a agua potable sustentable ni a sanidad básica.
“De hecho, cada gota de agua que llega a una vivienda en México, toma 100 años volver a recuperarla, situación que se agudiza con el cambio climático y falta de tecnología para tratarla, advirtió Franco, vicepresidente de la AMC, tras subrayar que se requiere usar el conocimiento científico del país y aplicar la ciencia y tecnología para hacer frente a los retos actuales.
Entre ellos, enfermedades relacionadas con la diarrea que matan a más menores de cinco años que el VIH/sida, la malaria y el sarampión, y son la segunda causa más importante de muerte infantil. A escala mundial, más de 85 por ciento de las causas de la diarrea se deben al consumo de agua insalubre, sanidad inadecuada e higiene insuficiente.
Ante tal reto, consideraron urgente aumentar el producto interno bruto (PIB) que México destina a la ciencia y tecnología, rubro en que el país se ubica a la zaga no sólo con respecto a naciones ricas, también con los emergentes como China y Brasil.
En México, la industria está poco tecnificada, no hay inversión privada para crear nuevas tecnologías y prevalece en la clase política una gran ignorancia sobre la importancia de la ciencia y la tecnología para afrontar los rezagos
, dijo Jiménez, investigadora de la UNAM, ganadora del Global Water Award 2010.
Incluso, advirtió, se prefiere a empresas extranjeras sobre los expertos nacionales, lo cual ha provocado que más de 50 por ciento de la infraestructura construida por trasnacionales, no sirva para el tratamiento adecuado del agua
. Las afectaciones para el país son varias, porque las firmas extranjeras emplean a sus especialistas, y consumen su tecnología y materiales.
En el documento se hacen recomendaciones a los jefes de gobierno y Estados sobre las políticas que deben promover para garantizar el derecho a la educación científica, el acceso a agua de calidad y a la salud.