Ante el desorden que impera en el desarrollo urbano de la ciudad, el cual es avalado por jueces que otorgan amparos, representantes de organizaciones sociales y de comités ciudadanos conformaron un movimiento vecinal, cuyo objetivo es buscar que se haga justicia y no sólo que se aplique la ley.

En conferencia de prensa señalaron que las violaciones al uso de suelo son cometidas en todas las delegaciones: hay al menos un caso de violación por colonia, que altera nuestro modo cotidiano de vivir, y las autoridades lo han avalado de alguna u otra forma, expuso Paula Arizpe, de la colonia Pedregal, en la delegación Álvaro Obregón.

Manuel Palacios, de El Carmen, Coyoacán, señaló que en la ciudad de México se legisla para que los ciudadanos se dediquen a defenderse día y noche, ante el volumen de quejas que hay sin resolver. Dijo que cuenta con un registro de unos 40 inmuebles en litigio.

Manifestaron que cuando se detecta una violación por cambios en el uso de suelo o construcciones que están fuera de la norma, las autoridades sólo atienden intereses particulares y no los de la comunidad, pese a que son terceros perjudicados.

Jorge Martínez Stack, representante de La Conchita, en Coyoacán, comentó que pese a la violación en los usos de suelo por particulares, éstos recurren a jueces en busca de amparos, quienes supuestamente están para impartir justicia buscando el bien común, pero nos hemos enfrentado a lo opuesto. Vemos en el Poder Judicial enemigos que no nos dan respuesta y no damos cuenta de que son parte del problema.

Representantes vecinales de Polanco, en Miguel Hidalgo; La Conchita, Atlántida y El Carmen, en Coyoacán, y Pedregal, en Álvaro Obregón, detallaron los casos de violaciones al uso de suelo más representativos de sus colonias para sustentar los señalamientos.

Ante ello, Paula Arizpe dio a conocer que están conformando un movimiento, el cual a la fecha agrupa 60 asociaciones vecinales. Al final dijo que los jueces consienten los actos contrarios al bien común; por ello queremos abrir el dialogo para enderezar el barco con aquellas personas que quieran hacerlo y vivamos en una ciudad donde todos podamos elegir la manera en la que queramos vivir.