En un análisis de los principales retos educativos en América Latina y el Caribe, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) llamó a los gobiernos de la región a impulsar una capacitación permanente y de calidad para los docentes latinoamericanos, quienes deberán asumir nuevos retos y mecanismos de evaluación, muy distintos a los aplicados en el pasado.

Al concluir la reunión regional Desafíos educativos clave para América Latina y el Caribe: profesores, calidad y equidad, con la asistencia de autoridades del ramo, especialistas y organizaciones civiles, la Unesco demandó a los responsables de los sistemas de enseñanza acelerar el paso en materia de calidad y equidad, pues 2.9 millones de niños en la zona no están inscritos en la escuela, mientras 36 millones de adultos son analfabetas y los niveles de aprovechamiento escolar son bajos en muchos países.

Tras un análisis de los avances y retos en las metas educativas de las naciones latinoamericanas, destacó que la desigualdad es la gran tarea pendiente en la región, y se considera fundamental para alcanzar la calidad, que es la segunda gran deuda de los sistemas de enseñanza.

En cuanto a las condiciones que enfrenan los maestros latinoamericanos para realizar su tarea, especialistas y autoridades del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (Ecosoc) señalaron que los gobiernos de la región deberán tener un sistema de formación docente permanente, basado en el mérito y compensado con niveles salariales adecuados.

Consideraron que las sociedades actuales demandan a los sistemas educativos resultados “más exigentes que en el pasado, por lo que es necesario avanzar en una ‘responsabilidad justa’ de los maestros, otorgándoles las condiciones que necesitan para prepararse para un nuevo desempeño”.

En cuanto a la aplicación de estándares de calidad a los mentores, aseguraron que éstos deben verse como un norte, un estandarte que explica a la sociedad lo que sabe y lo que debe saber hacer un docente, y esto incluye –afirmaron– una profunda revisión sobre el papel de la nuevas tecnologías de la información en el aula y el reto de que docentes formados en el siglo XX formen a estudiantes del siglo XXI, por lo que señalaron que es necesario avanzar en la construcción de un marco común en términos de procesos y resultados, conceptos y usos, que favorezcan el aprendizaje.

Las conclusiones del encuentro, realizado del 12 a 13 de mayo, en Buenos Aires, Argentina, con más de 100 delegados de la región, serán discutidas durante el Examen Ministerial Anual 2011 del Ecosoc, que se realizará en julio próximo en Ginebra, Suiza.