Tómalo, léelo y devuélvelo. Además de ser las instrucciones, esa expresión es el lema del programa Lee mientras viajas, que ayer fue puesto en marcha en la Terminal de Autobuses de Pasajeros de Oriente (TAPO).

La iniciativa consiste en el préstamo de una antología de autores mexicanos a los pasajeros que viajen de la ciudad de México a la de Puebla, y de retorno, por el servicio de lujo de la línea ADO.

Los promotores de la idea son la asociación para Leer en libertad, que de esa manera gana un espacio más para su empeño de fomentar la lectura en México, así como la mencionada empresa camionera, la cual financió el tiraje de 10 mil ejemplares de esa antología.

El volumen incluye textos de Elena Poniatowska, José Agustín, Efraín Huerta, Mónica Lavín, Cristina Pacheco, Bernardo Fernández, Bef; Paco Ignacio Taibo II y Vicente Riva Palacio, y será sustituido después de dos meses por otro libro con características similares, que estará a disposición de los viajeros durante la misma temporalidad.

Por acercarse a la literatura

Según Paloma Saiz Tejero, titular de la asociación civil Para leer en libertad, la finalidad del programa es promover que la literatura se extienda lo más posible entre la sociedad mexicana, a partir de poner los libros en las manos de las personas.

“No podemos pretender que México se vuelva un país de lectores a partir de que nos digan ‘vayan a comprar libros’ o ‘leer es muy bueno’. Todas esas declaraciones me parecen absurdas si uno no hace algo para acercar a las personas a la buena literatura”, sostuvo en entrevista.

Nos critican mucho porque regalamos libros, pero una persona a la que le regalan un libro y se engancha con él, lo siguiente que hará es comprarlos. Creemos que ésta es la mejor manera de acercar la lectura a la sociedad.

De acuerdo con la activista, la iniciativa comenzada ayer en la citada central camionera es una fase piloto, pues se tiene el interés de mantenerla de forma indefinida y extenderla a todas las rutas de ADO e incluso al resto de las líneas de autotransporte.

Con este tipo de proyectos queda demostrado que el fomento a la lectura es un problema de voluntad política, no de dinero. Es un programa basado en la confianza hacia las personas; aunque no nos preocupa mucho si al término del plazo (cuatro meses) queden pocos ejemplares; lo ideal es que estén los suficientes para que todos los pasajeros que quieran leer, puedan hacerlo, agregó Paloma Sáiz.

La puesta en marcha de Lee mientras viajas fue acompañada por el grupo Calacas Jazz Band y la inauguración en la TAPO de un tianguis de libros, con 20 puestos, que se mantendrá allí hasta el 18 de mayo.