En distintas cárceles de Quintana Roo, Durango y Nuevo León, siete reos que ingresaron en días recientes fueron asesinados entre miércoles y viernes, confirmaron fuentes oficiales.

En la cárcel de Cancún, Quintana Roo, un presunto ajuste de cuentas entre bandas de narcotraficantes dejó tres internos muertos y uno lesionado de gravedad el jueves alrededor de las 23.30 horas dentro de una celda del pabellón construido en 2010, informó en conferencia de prensa el procurador general de Justicia estatal, Gaspar Armando García Torres.

Los ultimados –señaló– son Víctor de los Santos de la Cruz, Eddy Blain González Velázquez e Higinio Aguilar, quienes fueron detenidos el pasado lunes por secuestro y pertenecían a la banda de Los Pelones, oponente de Los Zetas.

El procurador general informó que ya se tomaron las declaraciones de dos reos y un custodio implicados en el primer incidente con víctimas fatales que se registra dentro del penal que dirige desde mediados de abril pasado el capitán retirado Higinio Sánchez Baltasar.

Otros tres convictos que te-nían menos de cuatro horas de haber sido internados en el Centro de Reinserción Social de Gómez Palacio, Durango, identificados como Marco Antonio Moreno y Jesús Saúl Acosta, de 18 años, y Manuel Alejandro Ávalos de 26, perecieron apuñalados el miércoles por la tarde.

Todos ellos cometieron el delito de robo agravado de vehículo al despojar violentamente al conductor de una camioneta Lobo Tritón con placas de Aguascalientes, pero antes habían hurtado el automóvil en el que se desplazaban y fueron detenidos por la policía del también lagunero municipio duranguense de Lerdo, indicaron fuentes ministeriales este viernes.

Sin detallar sobre el ataque donde perecieron, se informó que los tres cadáveres estaban en el área de indiciados conocida como El Gallinero de la instalación penitenciaria, donde se han cometido otros homicidios, y mostraban diversas lesiones producidas por arma blanca en pecho y abdomen.

Por último, en el penal del Topo Chico de Monterrey, Nuevo León, el preso José Eduardo Alemán Paredes, de 18 años, que había ingresado cuatro días antes, fue presuntamente asesinado a golpes durante la madrugada de este viernes.

El sujeto fue detenido el domingo junto con un presunto cómplice de nombre Johny Torres Maldonado luego de asaltar un Súper 7 y despojar de su vehículo a una taxista en la colonia Bosques del Vergel de la capital nuevoleonesa, reseñó el reporte oficial.

El 18 de junio de 2010 murieron de igual forma dos presos en la misma cárcel, y el pasado 9 de enero Gabriel Ayala Romero, El Zar de la Piratería, fue asesinado ahí mismo durante una supuesta riña. Además, en el penal del municipio de Apodaca, dos internos amanecieron colgados en sus celdas el pasado 19 de abril, cuando llevaban sólo cuatro días recluidos.