Con un despliegue visual avasallador, vistosas coreografías/escenografías y 18 canciones divididas en cuatro episodios: City, Subway, Forest y Monster Ball, la cantante neoyorquina Lady Gaga ofreció un luminoso y lúbrico/lúdico concierto en su primera presentación en el Foro Sol de la ciudad de México, el jueves por la noche, dentro de su gira mundial Monster Ball, concierto transformado en espacio de libertad y tolerancia. “Hoy los freaks están allá afuera. He reunido a todos los normales aquí para que seamos completamente libres... no oculten sus sentimientos. Hoy sean quien quieran ser.”

Después de subirse el telón comenzó el performace con la primera parte del espectáculo, City. Gaga comenzó con Dance in the dark. Deconstruyendo el escenario, pateando todos los rincones seguida/secundada porsu brigada, mostró su faceta de bailarina.

Exhorto a la tolerancia

El público hizo lo propio y le festejó cada movimiento y cada canción. Con Glitter and grease, Just dance, Beautiful, dirty, rich y The fame concluyó la primera parte, en la cual recordó pasajes de su vida como artista, tocando el piano, el contrabajo y exhortando en favor de la diversidad y la libertad en todo momento: “Saquen sus armas, apunten hacia el cielo y olvídense de todo; esto es el Monster Ball y los va a liberar”.

El segundo episodio, Subway, de la llamada primera ópera electro-pop, Gaga salió del inframundo en un vagón de tren, ataviada con un hábito blanco, como monja posmoderna, y rápidamente se despojó de algunos accesorios para quedar más ligera. Cantaba Love game, siguió Boys, boys, boys, primer gran momento de la noche, y cerró con Telephone, Americano y You and I, ésta la tocó sola con un incandescente piano en llamas.

El espectáculo ofrecido por innumerables fanáticas disfrazadas a lo Lady Gaga pulularon por el inmueble: Ladies Gagas con peluca, con orejas, con botas altas rojas y negras, con playeras estampadas y con pechos desnudos... diseñados ex profeso para la ocasión. Fue tanto el fervor que mostró el público que le cantaron Cielito lindo, gesto que le arrancó lágrimas a Gaga: “Gracias México city, los amo, les agradezco que estén esta noche aquí”.

Durante el tercer acto, Forest, el ánimo no podía estar mejor, pues llegaron Monster, Teeth, Alejandro y su éxito mundial Pokerface, que prolongó el éxtasis colectivo. El ocaso de la velada se veía venir cuando se subió el telón por cuarta ocasión anunciando la última parte del show Monster Ball; así llegaron Judas y Bad romance, canciones con las cuales los 45 mil fanáticos reunidos en el Foro Sol sucumbieron irreductiblemente a los pies de Lady Gaga, quien, agradecida, se despidió con un: Gracias México.