Miles festejan en Bilbao el fallo en favor de las 254 candidaturas de la coalición nacionalista
Es un triunfo colectivo: voceros de la formación
Los magistrados se equivocan: la derecha
Viernes 6 de mayo de 2011, p. 30
Madrid, 5 de mayo. La coalición de la izquierda vasca Bildu sí se presentará en las elecciones municipales y forales del próximo 22 de mayo, decidió hoy el Tribunal Constitucional de España, al corregir un fallo con el que el Tribunal Supremo anuló las 254 candidaturas de la formación abertzale (nacionalista).
Miles de simpatizantes de la coalición independentista colmaron una plaza de Bilbao cuando, pasada la medianoche de este jueves, se informó del histórico fallo alcanzado en una votación de seis contra cinco, y que permitirá que 15 por ciento de la ciudadanía de Euskadi tenga representación electoral.
Bildu es una coalición integrada por Eusko Alkartasuna (EA), Alternatiba (que surgió de una escisión de Esker Batua-Izquierda Unida) y ciudadanos independientes próximos a la izquierda abertzale. El partido surgió a raíz de otra decisión judicial, la ilegalización por parte del Tribunal Supremo de la que pretendía ser la nueva marca electoral de independentismo radical, Sortu, que se convirtió en el primer partido de la antigua Batasuna que rechazó sin ambages
la violencia de ETA en sus estatutos.
Tras la presentación de las candidaturas de Bildu para el País Vasco y Navarra, de nuevo la abogacía del Estado, la fiscalía general, el gobierno español encabezado por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero y la oposición conservadora del Partido Popular (PP) impugnaron las listas y presentaron pruebas elaboradas por la policía en las que se asegura que la organización armada ETA estaba detrás de esta formación política.
Nueva presencia abertzale desde 2003
Los 16 magistrados del Tribunal Supremo optaron por anular las listas, sólo que en esta ocasión no se logró la unanimidad habitual en los procesos contra formaciones acusadas de situarse en la órbita de ETA y, de hecho, el voto particular de siete de los jueces afirmó que la anulación suponía una grave vulneración de los derechos constitucionales.
Tras presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional, el máximo órgano garantista del Estado español, se generó un intenso debate a su interior. De hecho, primero se realizó una votación en la sala segunda, pero como había un empate técnico se decidió elevar la moción al pleno del tribunal. La votación fue ajustada, de seis frente a cinco, y volvió a quedar de manifiesto la politización de la justicia: todos los que se opusieron a que Bildu estuviera presente en los comicios habían sido nombrados jueces a propuesta del PP, la formación que ha sido más radical en su rechazo a Bildu. Mientras que los magistrados que votaron a favor y aprobaron su presencia en los comicios fueron nombrados a propuesta del PSOE.
En el acta del fallo se asegura que se ha vulnerado el derecho de la recurrente en amparo (Bildu) a acceder a los cargos públicos en condiciones de igualdad, con los requisitos que señalan las leyes
, además declaró nula la sentencia del Supremo.
Los magistrados que votaron a favor de que Bildu esté en los comicios son: el presidente del Tribunal Constitucional Pascual Sala, Eugenii Gay, Elisa Pérez Vera, Pablo Pérez Tremps, Luis Ortega y Adela Asúa.
Este fallo supone en la práctica la presencia de una nueva formación abertzale en el escenario vasco, que desde 2003, con la ilegalización de Batasuna, dejó sin representación política a alrededor de 10 por ciento de los votantes. Se prevé que si se suman los apoyos de la antigua Batasuna con los de EA y Alternatiba podrían convertirse en una de las principales fuerzas políticas de la región, al controlar algo más de 15 por ciento del electorado.
Durante el día, en Bilbao marcharon miles de personas para exigir la legalización de Bildu y centenares de manifestantes permanecieron sentados en una plaza pública hasta esperar el fallo del tribunal. Se había instalado una gran pantalla y una carpa, desde la que se anunció pasada la medianoche que finalmente sí tenían autorizado ejercer su derechos constitucionales.
Peio Urizar y Oskar Matute, voceros de la coalición, afirmaron ante sus simpatizantes que durante este proceso nos han intentado convertir en cabezas de turco. Ha estado en juego la lucha de los que apuestan por la democracia frente a los que apuestan por la autocracia y la dedocracia, a los que no les importa la gente ni sus derechos
.
Apuntaron que han luchado frente a los que nos querían ver arrodillados y mudos. Este es un triunfo colectivo que nadie nos va a poder arrebatar jamás, al igual que nuestra dignidad. Y ahora tenemos ante nosotros el reto de hacer llegar nuestras propuestas a todos los pueblos de Euskal Herria y construir el país desde distintas sensibilidades de la izquierda
.
Durante la jornada de protesta, el ex lehendakari Carlos Garoikoetxea, fundador de EA, había afirmado que excluir a Bildu sería una aberración interpretativa. Es escandaloso que dos partidos legales de tradición democrática, y personas que están en posesión de sus derechos civiles y políticos para ejercer su voto y su participación política, sean objeto de una persecución macarthyana. Nada más parecido que lo que el senador McCarthy hizo contra izquierdistas en Estados Unidos. Es realmente escandaloso, así como el clima que se ha generado a lo largo y ancho de España. Me da mucha pena que el partido socialista se haya dejado empujar hasta este extremo por la derecha.
Mientras, la derecha política, las organizaciones de víctimas del terrorismo y algunos medios conservadores expresaron su cólera ante una decisión que consideran equivocada
y que, a su juicio, debería suponer la ruptura total entre el PP y el gobierno vasco, además de la colaboración con el gobierno español.
El dirigente del PP local, Antonio Basagoiti, aseguró que acatamos la decisión pero ni nos gusta ni nos parece acertada. Los magistrados se equivocan. Les digo a esos jueces y a quienes les mandan que si creen que los de Batasuna se han vuelto buenos que se los lleven a vivir a sus casas
.
En contraste está la postura del Partido Nacionalista Vasco (PNV, conservador), cuyo presidente, Íñigo Urkullu, señaló que hoy, después de diez años, Euskadi logra la participación política plena, gracias a que el TC ha enmendado la intención de condicional el mapa político e institucional de Euskadi
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