Académicos, estudiantes y trabajadores administrativos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) entregaron al consejo de esa casa de estudios una solicitud de revocación de mandato de la rectora, Esther Orozco Orozco, apoyada por más de tres mil firmas, al considerar que es la única forma de resolver la crisis que vive la institución.

Lo anterior sucedió durante el foro universitario que se realizó previo a las sesiones del consejo universitario, llevado a cabo en la sede Casa Libertad, en Iztapalapa, y durante el cual integrantes de la comunidad de esa institución expusieron sus posiciones sobre la problemática de la universidad, en medio de un clima de división y por momentos tenso entre quienes exigen la destitución de la rectora, que lanzaban gritos de fuera Orozco, y quienes la apoyan, que recriminaban las críticas de los primeros.

El foro duró más de tres horas, con la participación de 37 oradores. Allí, Esther Orozco escuchó con rostro serio las voces que exigían su destitución por su incapacidad para ocupar el cargo y mostrar un profundo desprecio por la comunidad universitaria, poniendo en riesgo la autonomía y el proyecto de la UACM, y aplaudiendo a quienes defendieron su gestión o hicieron un llamado a resolver la problemática mediante el diálogo.

Cuando parecía que finalmente se llevaría a cabo la sesión extraordinaria del consejo universitario, luego de que fuera cancelada en tres ocasiones, ésta se tuvo que suspender debido a que 14 de los consejeros no estuvieron de acuerdo con el orden del día, el cual incluía la presentación del diagnóstico sobre la situación de la UACM, así cómo de un informe sobre los festejos del décimo aniversario de la universidad, entre otros temas.

En un primer momento se había alcanzado el quórum para llevar a cabo la reunión al estar presentes 39 de los 42 miembros del consejo, pero al pasar a la aprobación de los temas que se tocarían, varios consejeros manifestaron su desacuerdo con la presentación del diagnóstico al considerar que era irregular, pues dicho documento tenía que haber sido entregado antes a los integrantes del órgano universitario.

Durante poco menos de media hora, los consejeros debatieron sobre la pertinencia de incluir ese tema en la sesión, al tiempo que algunos de ellos se comprometieron a dar cauce a la solicitud de revocación de mandato para lo cual solicitarán una sesión extraordinaria del consejo.

Pese a las protestas, la secretaría técnica del organismo, Gloria Luz Alejandre Ramírez, puso a votación el orden del día, y aunque la mayoría lo aceptó, los 14 consejeros que lo rechazaron se levantaron de la mesa y salieron del salón donde se llevaba a cabo la reunión, lo que provocó que sólo quedaran siete representes de la comunidad estudiantil de los 15 que hay en total, cuando se requiere la presencia de al menos ocho para llevar a cabo la sesión, motivo por el cual se tuvo que posponer.