Salt Lake City, 26 de abril. Con polémica de por medio el Monterrey buscará este miércoles hacer valer la hegemonía de los equipos mexicanos en la Concachampions y conquistar su primer título en esa competencia, cuando visite al Real Salt Lake en complicado duelo.

Los Rayados dejaron escapar el triunfo en el partido de ida en casa, donde empataron 2-2, y saltarán al campo del estadio Río Tinto con la obligación de conseguir una victoria o una igualada de por lo menos 3-3.

Además sufrirá tres bajas importantes por las lesiones del delantero Aldo de Nigris y el volante Luis Pérez, quienes se suman a la ausencia de Jesús Zabala, suspendido por acumulación de tarjetas.

Sin embargo, el presidente del club mexicano, Luis Miguel Salvador, confió en alzar por primera vez el trofeo de la Confederación de Futbol de Norte, Centroamérica y el Caribe, que da acceso al Mundial de Clubes.

Algo que nos deja tranquilos es que este equipo sabe jugar finales. Ha demostrado mucho carácter y no creo que este miércoles sea la excepción. Estamos conscientes de lo que se está jugando, agregó.

Tener paciencia y serenidad serán las claves para un partido que es muy complicado, porque juegan, se paran bien y son muy ordenados, apuntó por su parte el delantero Sergio Santana.

Los estadunidenses buscan el título pero también responder con hechos a las recientes declaraciones del técnico Víctor Manuel Vucetich, quien los acusó de ensuciar el juego en Monterrey.

Hablar es barato. Si son tan buenos como dicen tienen que mostrarlo. Si son superiores, que vengan aquí y ganen, replicó el argentino Fabián Espíndola, mientras el gerente general del equipo, Garth Lagerway, remarcó que el evento pone al mundo sobre aviso de que el futbol estadunidense está dando un paso más hacia adelante.

Real Salt Lake pretende emular a Galaxy de los Ángeles, campeón de la Concachampions en 2000, y llega al partido decisivo con la temible marca de 37 fechas sin derrota en su casa.

Tener esa posibilidad en tu mente de poder levantar el trofeo ante un lleno completo gritando por nosotros, esa es la materia de la que están hechos los sueños, afirmó el entrenador del equipo de Utah.

Hay que sentirse bien por lo que logramos en el partido de ida, pero no debemos confiarnos. Monterrey sigue siendo un rival muy peligroso, puntualizó.