El secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), Miguel Alcántara Soria, informó que se ha definido con los gobernadores de Nuevo León, Tamaulipas, Chihuahua y Michoacán un calendario para el repliegue gradual y paulatino del Ejército, la Armada y la Policía Federal (PF) antes de tres años, condicionado a la integración de policías confiables y profesionales en esas entidades.

Estamos construyendo un calendario muy puntual para exigirles que fortalezcan a sus policías. Mientras un gobierno no atienda los problemas de seguridad será necesaria la presencia de las fuerzas federales, porque nos vamos a salir y los vamos a dejar sin PF, Ejército y Marina, afirmó durante una reunión de trabajo con la Comisión de Seguridad Pública de la Cámara de Diputados.

Explicó que de los 31 estados y el Distrito Federal, sólo Aguascalientes ha cumplido con más de 75 por ciento de avance en el control de confianza de sus mandos, personal operativo y gabinete con acceso a funciones o información sensible.

Se le preguntó por qué el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, no ha sido sometido a ningún control de confianza desde que era titular de la desaparecida Agencia Federal de Investigaciones (AFI). Respondió que no cuenta con información para corroborar o desmentir esa información.

Alcántara Soria sostuvo ante diputados que cuando el Ejército y la PF retiran a policías municipales del servicio, los mandos ya no se presentan, y los gobiernos estatales deben hacerse cargo de la seguridad.

Pero, resaltó, debido a que en los estados del norte del país, como Tamaulipas, Sinaloa y Nuevo León, no hay hombres o mujeres que quieran ser policías, el SNSP ha iniciado una campaña de reclutamiento de jóvenes en otros estados que hayan terminado la secundaria o cursen bachillerato tecnológico.

En entrevista, afirmó que el reclutamiento se realizará entre abril y mayo, por lo que el resultado de la convocatoria en planteles del Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios o del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica no se conocerá hasta junio. El funcionario reconoció que hasta ayer ningún alumno había aceptado ser policía.

Cuando el diputado Rosendo Marín (PRD) le preguntó ¿cuántos muertos más se necesitan para acabar con la absurda guerra contra la delincuencia organizada?, Alcántara Soria respondió: no creo que nadie sepa en el mundo cuántos muertos más.

El funcionario evadió la mayoría de las preguntas de los diputados priístas, perredistas y petistas, e incluso cuando les respondía volteaba a ver el reloj en su muñeca izquierda, para no rebasar los cinco minutos acordados como límite. Pero con los panistas se explayó.

Así, no respondió al priísta Salvador Caro Cabrera, quien quiso saber cuántas armas de alto poder que el gobierno de Estados Unidos envió a México en la operación Rápido y furioso han sido utilizadas para cometer delitos del fuero federal o común.

Caro Cabrera afirmó que la Cámara ha concedido al Ejecutivo lo razonable, y el PRI coincide en que haya combate al crimen, pero no con la estrategia ni los resultados del gobierno federal.

El legislador apuntó que los operativos de la policía estatal de Jalisco, en el gobierno de Emilio González Márquez, son un ejemplo de cómo la estrategia contra la delincuencia se ha excedido.

Se ha pervertido. Los policías andan encapuchados, extorsionando a los ciudadanos en Jalisco, aseveró.

En cambio, cuando el panista Bonifacio Herrera preguntó por qué los funcionarios de los estados cucharean las cifras sobre asesinatos, Alcántara Soria contestó que lo hacen por órdenes de sus gobiernos. Los procuradores estatales reportan menos crímenes con el fin de reducir la expresión de inseguridad en sus entidades, señaló.

Finalmente, afirmó que 27 estados y el Distrito Federal mantienen un subejercicio de mil 319.8 millones de pesos en el gasto para seguridad.

No aplican los recursos, agregó, porque prefieren mantener el dinero en el banco para que genere algunos intereses.