Miércoles 6 de abril de 2011, p. 38
Campeche, Camp., 5 de abril. El líder del Frente Campesino 19 de Octubre, Armando García Jiménez, fue asesinado de seis balazos la madrugada de este martes por dos sicarios a bordo de una motocicleta, la cual abandonaron a unos kilómetros de donde perpetraron el crimen.
La Procuraduría General de Justicia del estado informó que el dirigente agrario de 48 años fue ultimado con una pistola calibre 40. Una de sus hijas, que lo acompañaba, fue rozada por una bala y se encuentra fuera de peligro.
El ataque ocurrió entre las 5 y 6 horas. García Jiménez, su hija y otras dos personas se dirigían a una reunión de trabajo en la capital del estado.
Cuando circulaban por el ejido El Encanto, a 50 metros de una caseta fitosanitaria, los alcanzó una motocicleta en la que viajaban dos sujetos, uno de los cuales disparó al líder campesino.
Los motociclistas se adelantaron unos metros y luego se detuvieron para disparar de nuevo a García Jiménez. Los heridos fueron trasladados al hospital general de Candelaria, donde a las 6:15 horas falleció García Jiménez.
Autoridades policiacas reportaron que una hora después del atentado se localizó la motocicleta en la que se desplazaban los agresores, así como dos cascos: la unidad había sido reportada como robada desde hacía más de un mes en Ciudad del Carmen.
El homicidio fue repudiado por los dirigentes de Convergencia, Manuel Zavala Salazar y Aníbal Ostoa Ortega, así como por el líder del Partido del Trabajo, Manuel Chablé Gutiérrez, quienes exigieron al gobernador Fernando Ortega Bernés el esclarecimiento del crimen.
Revelaron que Armando García Jiménez había recibido amenazas de dirigentes ganaderos de la región de Candelaria, cuyos predios fueron invadidos por labriegos a quienes encabezaba el líder del Frente Campesino 19 de Octubre.
García Jiménez aseguraba que los ranchos ganaderos estaban asentados sobre terrenos nacionales y que carecían de títulos de propiedad; por ello gestionaba la regularización de los predios en favor de sus representados.
En numerosas ocasiones el líder agrario sostuvo que en esos ranchos, ubicados en los límites de Campeche con Guatemala y Belice, se realizaban actividades ilícitas, principalmente tráfico de indocumentados y de armas.
El gobernador lamentó el asesinato e instruyó al procurador general de Justicia del Estado, Renato Sales Heredia, investigar y sancionar a los culpables.