El gobierno del Sinaloa investiga el destino de 250 millones de pesos destinados a saldar el adeudo con comuneros de poblados de Mazatlán y Concordia, desplazados durante el gobierno anterior por la construcción de la presa Picachos, confirmó el mandatario Mario López Valdez.

Dijo que esos recursos fueron autorizados antes de que terminara la administración del ex gobernador Jesús Aguilar Padilla, por lo cual solicitó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) aclarar si el gobierno federal entregó esos recursos al estatal.

Octavio Atilano Román, líder del movimiento de desplazados, dijo que realizarán movilizaciones si no se cubren cuanto antes los pagos pendientes.

Mientras, opositores a la presa El Zapotillo que se encuentran en plantón desde el 28 de marzo en el municipio de Cañadas de Obregón, Jalisco, casi paralizaron ayer la obra. La constructora y la Conagua presentaron denuncias penales por el bloqueo de la zona donde se construye el embalse, informó Raúl Iglesias Benítez, delegado regional de la Conagua, quien anticipó que en breve se iniciará la expropiación de los predios en Temacapulín, Acasico y Palmarejo.

Amnistía Internacional exhortó a las autoridades del estado a garantizar los derechos humanos de los pobladores que se oponen a la obra, y señalaron que tanto la empresa como la Conagua incumplieron una orden judicial emitida el 31 de enero para suspender el proyecto.

En Acapulco, Guerrero, el vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota, Felipe Flores Hernández, advirtió al nuevo director de la Comisión Federal de Electricidad, Antonio Vivanco Casamadrid, que los campesinos y pobladores de los bienes comunales de Cacahuatepec decidieron que el proyecto hidroeléctrico no se lleve a cabo.

El gobierno jamás cumple. Lo único que hemos encontrado es a miles de campesinos despojados que deambulan sin casa y tierra y sin un centavo, dijo.

Irene Sánchez, Javier Valdez, Juan Carlos García y Héctor Briseño

El Acueducto II filtrará aguas: autoridades

Crean comité para sanear ríos en el Edomex

Mariana Chávez y Javier Salinas Corresponsales

Querétaro, Qro., 30 de marzo. El agua de los manantiales de Infiernillos, que abastecerá la zona conurbada de Querétaro por medio del Acueducto II, ha registrado desde 2005 niveles de contaminación superiores a los permitidos por la norma oficial mexicana (NOM) 127.

Estudios de la Comisión Estatal de Aguas (CEA) y siete laboratorios privados han encontrado en los manantiales mercurio, arsénico, aluminio, hierro, cromo y coliformes fecales, así como radiactividad y turbiedad.

Del 19 de diciembre al 12 de enero de 2006 se hallaron 0.696 miligramos de nitrógeno amoniacal por litro, cuando la norma permite sólo 0.50 miligramos.

Del 30 de abril al 14 de mayo de 2008 se encontraron 170.315 miligramos de hierro por litro de agua, cuando el límite es de 0.3 miligramos; 0.1487 miligramos de cromo (el máximo es de 0.05); 0.0877 de arsénico, 3.5 veces más de lo permitido, y 57.840 miligramos de aluminio, cuando el tope es de 0.2 miligramos.

La CEA reconoció que sus análisis del agua sólo incluyen 12 de 56 indicadores y argumentó que ello se debió a falta de equipo o exceso de trabajo.

Asimismo sostuvo que cualquier contaminante que provenga de los manantiales o de la presa Zimapán será eliminado con la planta potabilizadora del Acueducto II, inaugurado el 17 de febrero pasado.

En el estado de México, investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo (Uach) formaron el Comité de Cuenca Texcoco para sanear los ríos Coaxcacoaco, Texcoco, Chapingo y San Bernardino, donde se detectaron poco más de un millón de coliformes fecales por cada 100 mililitros de agua.

Óscar Palacios, investigador de la UACh, señaló que la norma permite sólo mil coliformes por cada 100 mililitros de agua, pero los ríos mencionados se han convertido en focos de infección por falta de tratamiento del agua. Añadió que la norma oficial estipula que todas las comunidades de más de 20 mil habitantes deben tratar sus aguas, pero eso no ocurre.