La ex subsecretaria de Comunicaciones, Purificación Carpinteyro, presentará una demanda por daño moral contra el Estado mexicano, el ex secretario de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez Kuenzler y, si procede, contra el jefe de la unidad jurídica de la SCT, Gerardo Sánchez Henkel, por la persecución de Estado que supuestamente orquestaron contra su persona, luego de que hizo del conocimiento del presidente Felipe Calderón los malos manejos que había en la dependencia.

Estoy no sólo en mi derecho sino en la obligación de demandar por daño moral, porque no se puede permitir la impunidad, no se pueden violentar las leyes, los derechos de los ciudadanos, y no puede hacerse una persecución como ocurrió en mi contra.

Luego de que un juzgado le concedió el auto de libertad, Carpinteyro señaló que en el proceso existieron irregularidades, que van desde el uso de recursos e instancias públicas hechas por Luis Téllez Kuenzler –como el área jurídica de la secretaría– hasta el acuerdo que hubo entre la SCT y Gobernación –entonces con Gómez Mont al frente– para que sus abogados la acusaran.

Puntualizó que en su declaración Sánchez Henkel negó que el entonces secretario Téllez le hubiera ordenado iniciar una demanda en su contra, lo que el propio Téllez contradijo a su vez en su declaración, al afirmar que sí lo había instruido. Ahí habría que ver quién mintió, observó.

Destacó que Sánchez Henkel incurrió en faltas como acusarla desde el principio de ser culpable de haber espiado al secretario Téllez, además de presentar la demanda en contra de Carpinteyro y no en contra de quien resulte responsable.

Sánchez Henkel acusó a la ex funcionaria de haber enviado por lo menos una carta con amenazas a Luis Téllez, sólo porque le pareció que la P de mi firma se parecía a la P que aparecía en la misiva, explicó Carpinteyro.

Lo más grave es que en el interrogatorio Sánchez Henkel dijo que no recibió instrucciones de Luis Téllez, pero el entonces secretario dijo que sí, y que además el secretario de Gobernación Gómez Mont, le dijo que sus áreas jurídicas se pusieran de acuerdo para actuar en mi contra, lo que es una persecución de Estado.

Purificación Carpinteyro dijo que se trató de una acción concertada en contra de alguien incómodo para el gobierno por haber denunciado a Luis Téllez. El presidente Calderón consideró que había cometido una deslealtad contra el secretario, pero mi obligación es con el Estado, destacó.

La ex funcionaria deslindó de cargos a Héctor Osuna Jaime, ex presidente de la Cofetel, que le entregó las grabaciones.