Buenos Aires, 28 de marzo. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, era esperado esta noche en Buenos Aires y mañana será recibido por la mandataria argentina Cristina Fernández de Kirchner, en el marco del encuentro de la tercera Comisión Binacional de Alto Nivel entre ambas naciones.

Chávez, quien realiza una gira por varios países de América Latina, cumplirá una apretada agenda en el país y, además del encuentro con su par argentina, en el cual se firmarán los acuerdos bilaterales que preparan las cancillerías de ambos países, asistirá a un almuerzo ofrecido por su anfitriona.

Asimismo visitará el astillero Tandanor, que se recuperó notoriamente después de acuerdos con Venezuela; en la tarde recibirá el Premio Rodolfo Walsh en la categoría Presidente latinoamericano por la comunicación popular, en la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Nacional de La Plata, provincia de Buenos Aires.

Los encuentros bilaterales fueron decididos por ambos mandatarios en 2008 y se concretaron en diciembre de 2009 en Buenos Aires y en abril de 2010 en Caracas.

El embajador de Venezuela en Argentina, Arévalo Méndez, dijo a La Jornada que durante las reuniones de las comisiones bilaterales se avanzó notablemente en acuerdos y en nuevas exploraciones sobre temas de creación de industrias, con asesoría argentina y también en viviendas. Se incrementará la cooperación industrial y agrícola, dijo el diplomático, quien destacó la importancia política del encuentro.

La visita de Chávez ocurre en momentos en que encuestas locales como las de la empresa de Mora y Araujo adjudican entre 64 y 67 por ciento de aprobación a la gestión de la mandataria y una fuerte ventaja sobre sus opositores.

El oficialismo triunfó recientemente en la provincia de Catamarca, y ahora en Chubut, en el sur del país, donde se está comprobando un escandaloso fraude del gobernador opositor Mario das Neves, aliado al derechista Peronismo Federal. Junto al oficial Frente para la Victoria, también la opositora Unión Cívica Radical denunció el fraude. Estas elecciones son un termómetro político para las presidenciales de octubre próximo.