Viernes 25 de marzo de 2011, p. 3
Damasco, 24 de marzo. Defensores de derechos humanos y testigos citados por agencias de prensa responsabilizaron hoy a las fuerzas de seguridad de Siria de matar a más de un centenar de manifestantes el miércoles en la ciudad de Deraa, mientras el gobierno del presidente Bashar Assad liberó a todos los detenidos durante los nueve días de protestas en el país, después del anuncio de una serie de concesiones para responder a la revuelta.
El gobierno prometió poner fin al estado de emergencia, vigente desde 1963, establecer nuevos mecanismos anticorrupción, un alza salarial de 30 por ciento para los empleados públicos, nuevas leyes que permitan más libertad de prensa y la creación de otros movimientos políticos, además del partido Baaz, que gobierna Siria desde hace 50 años.
La consejera del presidente Assad, Busaina Shaaban, declaró que las demandas de la población son legítimas
, aunque también aseguró que en las manifestaciones hay infiltrados
y dijo que se investiga quién está detrás de estas manifestaciones y su posible financiamiento extranjero
.
Shaaban habló de diez muertos desde que comenzaron las manifestaciones, el 15 de marzo, pero activistas de derechos humanos aseguraron que sólo ayer fueron abatidas unas cien personas en Deraa, y otras 50 han muerto en localidades aledañas. Este día, más de 20 mil personas participaron en los funerales de las víctimas en Deraa.
En Yemen, guardias presidenciales leales a Alí Abdulá Saleh se enfrentaron con unidades del ejército que apoyan a la oposición en la ciudad de Mukala, con saldo de tres heridos, mientras que en Taiz fuerzas oficiales mataron a dos personas al disparar contra 200 manifestantes que protestaban por un corte de energía eléctrica. En Adén el estallido de una bomba al paso de una patrulla dejó un policía muerto y siete lesionados.
En Jordania, partidarios del gobierno atacaron a cientos de jóvenes congregados en la plaza Gamal Abdel Naser, de Ammán, que demandaban reformas políticas. Más tarde, la policía intentó dispersar a los manifestantes y cortó el suministro eléctrico en la zona.
De visita en El Cairo, el ministro de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, prometió a Egipto que seguirá recibiendo ayuda de Washington.