Jueves 24 de marzo de 2011, p. 9
El secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, insistió ayer en la versión de que ningún funcionario del gobierno de Felipe Calderón sabía de la operación estadunidense denominada Rápido y furioso, por medio de la cual Estados Unidos entregó armas de alto poder al crimen organizado en México.
Luego de una reunión privada con el funcionario, el presidente de la Comisión Bicamaral de Seguridad Nacional, diputado Gustavo González (PAN), refirió que Poiré explicó a los legisladores que una unidad de la Procuraduría General de la República (PGR), especializada en delitos cometidos en el extranjero, inició una investigación sobre el mencionado operativo, pero dijo que los detalles de ésta permanecerán en secreto hasta concluirla.
“En el marco de la comparecencia (de Poiré) quedó claro que no existía conocimiento de parte del gobierno mexicano de la operación Rápido y furioso”, dijo González.