Jueves 24 de marzo de 2011, p. 4
Jerusalén, 23 de marzo. Una persona murió y 39 resultaron heridas tras la explosión de un artefacto en la principal estación de autobuses de Jerusalén, en el primer atentado aquí desde hace siete años, en tanto que aviones de guerra israelíes volvieron a atacar Gaza, en una nueva escalada de violencia entre las milicias palestinas e Israel.
La bomba de dos kilos colocada en una parada de autobuses fue activada vía teléfono celular a las 15 horas. Una mujer de 59 años murió y más de una treintena de personas resultaron heridas. Sobre este atentado nadie se responsabilizó.
La escalada de violencia creció desde el sábado, pero esta mañana las Brigadas al Qods, brazo armado del movimiento de resistencia Yihad Islámica, reinvindicó el lanzamiento de dos cohetes Grad sobre las ciudades israelíes de Beersheba y Ashod, en represalia por los ataques de la aviación israelí que el martes dejaron ocho palestinos muertos y 19 heridos.
Al tiempo que ocurría el atentado de Jerusalén, en Gaza miles de palestinos enterraban a los ocho muertos que dejaron los 13 ataques aéreos de Israel.
Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, suspendió una visita a Rusia para evaluar la situación y afirmó que su gobierno devolverá cada golpe
de los terroristas
. Netanyahu, que asumió el poder en 2009, aseveró que Israel defenderá agresivamente y con determinación
a sus ciudadanos y que se hará en poco tiempo.
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, quien promovía en Rusia una reunión del llamado Cuarteto para la Paz en Medio Oriente para mediados de abril, condenó los hechos en Jerusalén y deploró las acciones del ejército israelí. Dijo que estos actos son una vergüenza, dañan nuestra lucha justa y contradicen nuestra legítima demanda de independencia por la vía pacífica
.
El movimiento islamita Hamas, que gobierna en Gaza, dijo que está determinado a restablecer la calma
, sobre la tregua de hecho que existía. Responsabilizó a Israel del deterioro de la situación como consecuencia de la muerte de dos de sus activistas por la aviación de Tel Aviv la semana pasada.
El presidente estadunidense, Barack Obama, condenó el atentado de Jerusalén y el lanzamiento de cohetes desde la franja de Gaza hacia Israel. El secretario estadunidense de Defensa, Robert Gates, de visita en El Cairo, también condenó el horrible atentado terrorista
en Jerusalén, pero dijo no creer que haya una degradación
de la situación en Israel.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó de inaceptable
el atentado en Jerusalén. Poco antes, había lamentado la muerte de tres niños palestinos y su tío en un ataque israelí en Gaza.
El gobierno de Rusia se sumó a las condenas.